Las altas temperaturas que se han registrado durante los meses de primavera y el verano han adelantado la vendimia en todas las comarcas de la Isla. La cosecha de la uva, que de forma generalizada comienza en la segunda quincena de agosto, empezó a realizarse hace casi un mes en algunas zonas de Tenerife y todavía prosigue en muchas fincas repartidas por las diferentes áreas vinícolas.

Los técnicos y responsables de los Consejos Reguladores de las seis Denominaciones de Origen (D.O.) que existen en la Isla coinciden en que esta cosecha será mejor que la del año anterior, cuando en algunas zonas se perdió hasta el 50% debido a las condiciones anómalas de precipitaciones y temperatura. Este año, la situación es diferente y los consejos reguladores señalan que incrementarán o al menos mantendrán la producción del año pasado.

En concreto, en algunas comarcas como el Valle de La Orotava el incrementó será del 40% respecto a 2019. En el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Ycoden-Daute-Isora y Denominación de origen Islas Canarias estiman experimentar un aumento de entre el 25 y el 30%, mientras que en la D. O. de Tacoronte-Acentejo esperan obtener una cosecha un 20% mayor que la del año pasado. Por su parte, en la comarca de Güímar y Abona prevén que la producción se mantenga o sea ligeramente superior a la de la temporada anterior.

A pesar de las dificultades por las que han atravesado las bodegas durante este año, debido a la paralización de la comercialización, las denominaciones de origen aseguran que los viticultores no tendrán problemas para vender su uva, ya que los bodegueros han confirmado que comprarán la totalidad de la producción.

Denominación de Origen Tacoronte-Acentejo. La gerente del Consejo Regulador de la Denominación De Origen de Tacoronte-Acentejo, Mari Paz Gil, explica que las condiciones para la viña a lo largo de los últimos doce meses han sido las óptimas. "El invierno llegó en el momento oportuno y hubo frío y lluvia, mientras que la primavera ha tenido temperaturas medias altas y eso ha hecho que la uva madure bien", apunta. Unas condiciones que han provocado que "el adelanto de la vendimia prácticamente en un mes", por lo que mas del 30% de las bodegas de la comarca están ya cosechando.

En cuanto a la calidad de la producción, Gil afirma que este año es "óptima", ya que se encuentra en un estado de maduración excelente y un grado alcohólico perfecto. "Todavía estamos en un estado inicial de la vendimia, pero los parámetros responden a unos vinos de calidad", valora esta experta.

Respecto a la situación de las bodegas de la comarca, Gil expone que "la estimación es que recojan incluso un poco más de uva que el año pasado" y que los precios se mantengan. La gerente señala que debido a la mala cosecha del año anterior, en estos momentos no existen excedentes de vino, a pesar de la caída de la comercialización provocada por el coronavirus. "Nuestra situación es menos mala que la de otras comarcas, porque al haber tenido una cosecha corta en 2019 nos ha afectado, pero en menor medida", señala. Además, añade que las bodegas de Tacoronte Acentejo "en un 80% venden en las grandes superficies y esa venta se ha mantenido e incluso incrementado en algunos casos".

Denominación de Origen Valle de Güímar. El gerente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Valle de Güímar, Óscar Rodríguez, apunta que el estado sanitario de la uva de la comarca este año es "muy bueno", ya que las condiciones han acompañado a lo largo de todo el año. Aclara que las únicas pérdidas que se han producido fueron debido a un fuerte viento que sopló, sobre todo en las partes altas, el pasado mes de junio, pero insiste en que las condiciones del propio Valle de Güímar hacen que incluso la sequía afecte menos a las viñas en la zona. "Tenemos un ambiente más húmedo y esto hace que a pesar de que haya sequía no tengamos pérdidas tan brutales como en otras comarcas", expone el responsable del Consejo Regulador.

Una situación que hace que los agricultores de la zona apliquen menos tratamientos a las viñas, lo que, por otro lado, las hace más vulnerables a las plagas. Sin embargo, este año la incidencia de las plagas más dañinas ha sido escasa, por lo que la producción goza de una buena salud.

Rodríguez afirma que bodegas de otras partes de la Isla acuden a la comarca con la intención de comprar uva, algo que descontenta a los bodegueros locales. A pesar de que "tenemos alguna bodega que lo ha pasado peor porque toda su producción la destinaba a la hostelería", confirma que la cosecha de este año no peligra, ya que se podrá comercializar toda.

Denominación de Origen Valle de La Orotava. El adelanto de la vendimia en la comarca hará que toda la cosecha esté recogida a principios del mes de octubre, con un mes de diferencia respecto a otros años. Así lo asegura la técnico del Consejo Regulador de la Denominación de Origen del Valle de La Orotava, Marian Fernández, quien afirma que todo hace prever que la cosecha será mejor que en los años anteriores, cuando la sequía había disminuido la producción. "La de este año será como la de 2018, una cosecha normal, en la que nos recuperaremos de las pérdidas que sufrimos el año pasado del 40% en uva blanca y del 11% en tinta", apunta.

Fernández ratifica que las bodegas de la comarca "van a seguir asumiendo la compra de uva de años anteriores", a pesar de que sus ventas se han visto mermadas", no solo "porque venimos de un año con menos producción, sino "por el compromiso que han adquirido con los viticultores".

Sin embargo, la técnico evidencia que los productores deberán esforzarse para poder comercializar todo el vino, ya que la situación es incierta y lamenta que durante el confinamiento para muchos de ellos las ventas bajaron a cero. "A estas alturas otros años no quedaría nada de vino, pero todavía quedan existencias", asegura.

Denominación de Origen de Abona. Para el responsable del Consejero Regulador de la Denominación de Origen de Abona, Manuel Rodríguez, el último año ha sido "atípico" no solo por la situación provocada por el coronavirus. "No llovió demasiado, pero lo hizo cuando tenía que ser, y las altas temperaturas han adelantado la vendimia", matiza. Hasta ahora en la comarca se han cortado 20.000 kilos de las variedades más tempranas y aunque señala que todavía es pronto para hablar con determinación, todo hace apuntar a que se obtendrán unos vinos de calidad este año.

Sin embargo, Rodríguez expone que un solo año bueno no acabará con la mala racha que cosecha la viticultura en la Isla desde hace varios años. La sequía merma los cultivos y pronostica que el calor constante que ha existido en los últimos meses puede tener consecuencias para el próximo año, ya que puede afectar al tamaño del grano de los racimos. "Necesitamos varios inviernos buenos para que la planta se recupere por completo, porque tiene memoria", recalca.

Respecto a la compra de la uva por parte de las bodegas, Rodríguez asume que se va a comprar toda y que incluso existen productores "que necesitan más". Y explica que la tipología de los vinos que se producen en la zona, -en su mayoría caldos ligeros y afrutados-, "suele agotarse muy pronto y antes del confinamiento ya no quedaban casi existencias, por lo que las bodegas están vacías".

Denominación de Origen Ycoden-Daute-Isora y Denominación de Origen Islas Canarias. La sequía ha marcado el año vitivinícola en esta comarca, según el secretario del Consejo Regulador, Juan Jesús Méndez. En la zona ha llovido solo un 25% de lo que es habitual, una circunstancia que "trastoca el ciclo de la viña y ha adelantado la vendimia". Aún así esperan recoger más kilos que el pasado año y con este adelanto de la cosecha se prevé poder mantener las mejores condiciones de la uva para que entre en las bodegas de la comarca "con los parámetros perfectos y no exista una sobremeduración". Para Méndez el desastre en la reducción de la cosecha en 2019 ha sido una tabla de salvación en este año. Bajo su punto de vista, ha ayudado a que las consecuencias no hayan sido tan dramáticas en el sector tras la paralización de las ventas.

Aún así, insiste en que la comercialización, sobre todo a través de los hoteles y los establecimientos de restauración, no se acaba de recuperar, ya que en julio solo alcanzó el 50% de lo habitual. "Hay mucha incertidumbre, pero las bodegas se van a esforzar recoger toda la uva y mantener los precios", asegura.