La consejera de Acción Social, Participación Ciudadana y Diversidad del Cabildo, Marián Franquet, reclama al Gobierno de Canarias que abra en Tenerife un recurso de emergencia para atender a los menores migrantes que llegan a las costas del Archipiélago. La responsable insular afirma que la previsión de cara a las próximas semanas es que puedan llegar un número importante de pateras a Canarias y advierte de que la Isla puede experimentar dificultades para atender a todos los menores que viajen en ellas. "Estamos viendo que podemos tener serios problemas a la hora de acogerlos, sobre todo si llegan pateras de forma simultánea", sostiene.

Por eso, el Cabildo insular ya se ha dirigido al Ejecutivo regional para solicitar que comience a funcionar en Tenerife un recurso de emergencia para acoger a estas personas, como ya se ha hecho en otras islas como Lanzarote, Fuerteventura o Gran Canaria. "Creemos que Tenerife va a ser un destino claro de pateras, ya sea porque lleguen directamente o porque se deriven a la Isla", afirma, por lo que reitera que "el Gobierno de Canarias tendrá que abrir un recurso específico en Tenerife, para poder seguir atendiendo a los menores de la mejor manera".

El Ejecutivo regional ha delegado en los cabildos la responsabilidad legal de atender a los menores migrantes que llegan al Archipiélago, por lo que son estas administraciones las encargadas de acogerlos. "Nuestra obligación es igual que la que tenemos con cualquier menor de la Isla que esté en una situación de desprotección social y del que el Cabildo tenga su tutela", aclara. Por lo que insiste en que a los menores extranjeros se les atiende con los mismos recursos que a los tinerfeños. "Los hemos acogido dentro de la red de menores con un esfuerzo económico importante por parte del Cabildo, de más de seis millones de euros este año", señala Franquet.

Sin embargo, la llegada de la pandemia ocasionada por el nuevo coronavirus ha dificultado también esta labor, ya que obliga a disponer de recursos específicos para que estos menores puedan pasar la cuarentena a su llegada a la Isla. Franquet explica que se ha tenido que ampliar la red con recursos propios del Cabildo "para garantizar que cuando lleguen estén lo mejor atendidos mientras están aislados".

La responsable insular evidencia que hasta el momento, "el Cabildo ha podido dar respuesta a todos los casos, incluidos los de las pateras que nos están derivando desde Gran Canaria", pero no descarta que pueda haber problemas en las próximas semanas si, como se prevé, aumente la llegada de estas embarcaciones a las costas del Archipiélago.

Por eso, Franquet recalca que "el Gobierno de Canarias tiene que asumir también la responsabilidad que tiene dentro de sus competencias" y aunque ratifica que el Cabildo tinerfeño "colaborará en todo lo necesario" y existirá "toda la solidaridad y la disposición para atenderlos de la mejor manera posible", señala que el Ejecutivo autonómico tiene que abrir recursos específicos para menores.

La consejera tinerfeña insiste en que "si nos vemos desbordados no será porque no hay una alerta previa, porque nos están avisando desde hace mucho tiempo", lamenta y aunque se muestra de acuerdo en que el Estado debe tener una mayor implicación y abrir recursos para los migrantes mayores de edad, "no nos podemos olvidar que a los menores hay que atenderlos y tenemos una obligación con ellos muy superior a la que tenemos con los adultos".

Franquet asegura que cada vez están viniendo niños y niñas más pequeños y se han encontrado casos de menores con 12 o 13 años, que hacen el durísimo viaje solos. Expone que en estos casos, la administración tiene más tiempo para trabajar con ellos y aumentan sus posibilidades de adaptación, mientras que con los que llegan con 17 años tienen un margen muy pequeño para actuar.

El Cabildo tiene además recursos a los que puede derivar a los migrantes que cumplen 18 años bajo su tutela. En estos pisos pueden vivir durante un tiempo después de cumplir con la mayoría de edad para concluir sus estudios o realizar una inserción laboral y que estas personas no se vean de un día para otro en la calle.

Franquet también quiere poner sobre la mesa "algo de lo que se habla cada vez que hay una crisis humanitaria, pero que luego nunca se termina de concretar: la derivación entre diferentes comunidades autónomas", con el objetivo de reducir la presión social. La consejera indica que hay regiones "que apenas tienen", pero valora que en el propio Archipiélago también existen islas "donde apenas hay menores inmigrantes".

De esta manera, reconoce que el principal peso lo tienen Lanzarote, Fuerteventura y Gran Canaria, seguida de Tenerife, mientras que La Palma soporta muy poco peso migratorio y en La Gomera y El Hierro "no hay prácticamente ninguno".

En este sentido, insiste en que "si Tenerife tiene que abrir sus puertas para ayudar lo va a hacer, no tengo ninguna duda", pero también considera que "hay otras puertas que abrir" y que desde la Delegación del Gobierno en Canarias se debería de valorar estas otras opciones también. "A lo mejor tenemos que ir pensando en otro tipo de derivaciones a islas que no están teniendo esa presión social de acogimiento" y en las que considera que incluso los menores "tienen más posibilidades de integración". Aún así, resaltó que "Tenerife va a ser solidaria, porque ante una crisis humanitaria lo primero son las personas", pero considera que "el Gobierno de Canarias y el Estado tienen que empezar a tocar también otras puertas".