El Área de Medioambiente, es una de las más transversales, puesto que se relaciona con todas y cada una de las disciplinas de las ciencias, el arte, la cultura y con todas las facetas de nuestras vidas. Sin embargo, a nivel local parece ser la hermana pobre de otras áreas de la gestión

municipal, como por ejemplo la ordenación territorial, el comercio, el turismo, servicios sociales, fiestas, hacienda, etc.

Por lo general, suele englobarse como un apartado más en las competencias del concejal de turno responsable de urbanismo, que en este caso soy yo, Beatriz Perdomo. Es muy difícil hacer frente a un materia tan amplia y transversal. Según el diccionario de la RAE la palabra medioambiente, o medio ambiente se refiere al "Conjunto de circunstancias de un ser vivo", es decir a su propia vida.

Este Grupo de Gobierno tratará de revertir la actual situación, ampliando, dentro de las posibilidades presupuestarias, la dotación para el Área de Medioambiente. Prueba de ello, es la inversión de algo más de ciento veinte mil euros en la, tan esperada y necesaria, reparación del actual emisario del Puertito y que se espera sea ejecutada en lo que resta de año.

El ser humano tiene tendencia a obviar todo aquello que le es dado a cambio de nada y a menospreciar su valor, en la falsa creencia de que lo que hoy es, lo será también mañana. La consecuencia de ello la estamos sufriendo ya, no es algo que vaya a suceder en un futuro tan lejano que nos es indiferente porque nosotros no vamos a sufrirlo. El cambio climático está aquí y desgraciadamente ha venido para quedarse.

Los paisajes que nos llenan los sentidos con su belleza, la maravillosa fragancia de una flor, el aleteo incansable de una abeja, los baños relajantes en el agua salada del mar, los paseos por los senderos de nuestros montes,€ Todo eso y mucho más, es lo que está en serio peligro. Ya no podemos seguir mirando hacia otro lado. No basta con excusarnos diciendo que poco puedo hacer yo como ser individual, para remediar lo que está sucediendo.

Los vecinos y vecinas del municipio de Güímar, somos unos privilegiados. Dentro de nuestro territorio se encuentra la Reserva Natural Especial del Malpaís, un espacio prácticamente virgen, agreste pero hermoso. Son numerosas las especies vegetales que allí habitan: líquenes, tabaibas,

cardoncillo, lechuga de mar, cerrillos, aulagas, etc; y también animales, tales como insectos, reptiles y aves, entre ellas, el cernícalo. Es un lujo pasear por el sendero que lo recorre y dejarse absorber por él, en el convencimiento de que muchos lustros atrás fueron otros los que lo recorrieron.

Parte del territorio de nuestro municipio está incluido en el Parque Nacional del Teide y de la Corona Forestal, sin olvidar la amplia zona que se encuentra dentro del Paisaje Protegido de Las Siete Lomas y la belleza misteriosa del Barranco del Badajoz. Sin duda los güimareros y güimareras, tenemos muchos y buenos motivos para sentirnos orgullosos del lugar en el que vivimos.

Debemos procurar que las futuras generaciones puedan caminar por esos lugares y recrearse en ellos. Tenemos que pensar que aquello de lo que ahora disfrutamos es el legado dejado por quienes nos precedieron. No vale mirar a otro lado y quejarnos por todo lo que no se hace para evitar que nuestro planeta deje de ser un lugar habitable. Somos la solución.

En una cosa quiero hacer hincapié, debido a la actual pandemia que estamos sufriendo, a todo aquello que dejábamos tirado por las calles, playas y montes, se han sumado los guantes y las mascarillas. No entiendo en qué piensan esas personas que actúan tan alegremente, adónde

creen que va a parar eso que tiran y no me vale la excusa de que no hay papelera, si no la hay la buscas y depositas tus residuos donde corresponda, y a poder ser en su respectivo contenedor.

Hay que empezar a cambiar, darnos cuenta de que si queremos es posible. Todos, absolutamente todos debemos responsabilizarnos por nuestra cuota de culpa y hacer que cada día sea un poquito más pequeña.

Un saludo y procuren cuidarse mucho y cuidar de nuestro medioambiente.