¿Qué pasa en Arona?

En Arona ha habido muchos conflictos en el pasado y ahora parece que la historia se repite. Hay problemas, eso nadie lo puede negar, y me tienen muy preocupado. Donde hay construcción, donde hay intereses y se genera dinero, hay problemas. Arona no ha sabido resolverlos.

Y el PSOE tampoco, en un mandato, además, en el que cuenta con la gran ventaja de una mayoría absoluta. Se dice y no se cree?

Estoy muy disgustado. Queríamos darle estabilidad y tranquilidad a Arona y acabar con las sospechas sobre el urbanismo. Pero los problemas se repiten; la historia se repite. Siento mucho por el pueblo de Arona que volvamos a tener los mismos problemas. Lo he vivido y lo estoy viviendo. Y sé perfectamente lo que pasa. El PSOE ha pasado de tener cuatro concejales hace tres mandatos a 12 el pasado y 14 este, es decir, mayoría absoluta. Aquí se ha hecho una montaña con nada. Y no hay montaña. Reconozco que entre los concejales de mi partido hay celos.

Pero, de ahí a tener que destituir a uno de esos concejales, como es el caso de Luis García, de Urbanismo, expulsado el pasado 22 de junio por decisión del alcalde?

Estoy de acuerdo con la destitución de Luis García. Llevo más de un año mediando entre el alcalde y este concejal. Hay una parálisis total en esta Concejalía, en medio de la redacción de un nuevo Plan General de Ordenación, tumbado por el Supremo cuando llevaba nada menos que 20 años preparándose y solo un año antes de llegar José Julián Mena a la Alcaldía.

¿Por qué cree que se produce esa parálisis?

Esta parálisis viene de 2012, del follón que montó Coalición Canaria cuando gobernó en Arona. La herencia de Coalición no se ha podido resolver.

El PSOE lleva ya cinco años en el gobierno aronero.

Los problemas vienen de los técnicos. No todos, ojo. Hay mucha gente buena en ese departamento pero hay unos cuantos que vienen bichaditos desde hace tiempo y que están entre los que más mandan. Han mantenido los cargos y quieren seguir mangoneando. Han llevado por el mal camino al concejal Luis García [destituido el 22 de junio por Mena de Urbanismo]. Son ratitas de la administración.

Hablaba usted del Plan General. Hay que recordar que la Justicia lo tumbó porque ocurrió algo muy grave: se introdujeron modificaciones después de su aprobación por parte de la Cotmac del Gobierno de Canarias.

Lo hicieron mal. ¿Y por qué se hizo mal? Por dar prioridad a una serie de intereses, intereses particulares, no del pueblo.

Ahora hay denuncias de que precisamente se está intentando beneficiar a determinados intereses.

Eso es mentira total.

Pues esas denuncias han sido llevadas por ese concejal al que se refería, Luis García, a la Fiscalía. ¿Qué le parece esa decisión de García?

Si el tiene claro que existen esas irregularidades, me parece bien. De todas maneras, eso se tenía que haber debatido en el seno del partido. Yo mismo he convocado reuniones para hablar de esas diferencias que podía haber en el equipo de gobierno.

El problema es que no son diferencias de criterios lo que se ha llevado a Fiscalía. Son denuncias de presuntas extorsiones, coacciones y amenazas a empresarios y técnicos municipales.

Yo habría hecho lo mismo si veo indicios de extorsiones y amenazas. Y que se investigue y se decida. De todas maneras, creo que hay que ir a la Justicia cuando hablamos de casos graves. No se puede judicializar la política porque sí, porque lo que se consigue es paralizar un municipio.

Se transmite la sensación de que todo está podrido en Arona.

No todos los empresarios que trabajan en Arona son honrados y transparentes, eso está claro. El empresario siempre busca negocio. Yo soy de los que piensa que hay que hacerlo con dignidad, con la ley en la mano. Yo lo he hecho durante 46 años. He salido adelante y he sorteado muchas crisis, pero lo he hecho honradamente, trabajando todos los días del año.

¿A usted le han hablado de estas presuntas extorsiones y amenazas o las ha sufrido?

No. Es que yo no sé ni lo que ha denunciado exactamente el señor García. Como él no habló con su grupo ni conmigo como presidente antes de denunciarlo?

Hay hasta grabaciones.

He escuchado una grabación pero solo una parte, tres o cuatro frases, porque la cortan por donde a alguien le interesa. Sé a lo que se refiere. Todo eso ha sido orquestado porque hay empresarios que obstruyen para que las cosas no funcionen.

Pero es que hay un informe del 26 de diciembre de 2019, firmado por el jefe de Disciplina y Gestión Urbanística del Ayuntamiento, Damián Hernández Fumero, uno de los funcionarios de mayor rango del Ayuntamiento, que habla clarísimamente de coacciones y amenazas del abogado Felipe Campos, y de que estas amenazas paralizan la actividad municipal.

Hay parálisis en el Ayuntamiento. Las licencias no salen y lleva ocurriendo hace muchos años.

¿Por qué?

Mire, ese señor, el jefe de Disciplina Urbanística [Damián Hernández], en tres años no ha trabajado ni dos. Ahora está de baja otra vez. Ojo, máximo respeto a las bajas, faltaría más. Pero, de todos modos, el responsable máximo, el que tiene la potestad de descongestionar el área, es el concejal de Urbanismo, un concejal al que se le ha dado todo lo que ha pedido.

Pero es que en ese informe, el jefe técnico de la oficina de Urbanismo pide protección al concejal por esas coacciones y amenazas. Es gravísimo y algo que no ha ocurrido nunca en Arona.

No conozco ese informe y no conozco esas coacciones y amenazas. Creo que no existen. Sí conozco toda la libertad que se ha dado a ese señor que denuncia eso [Hernández] para reestructurar el departamento. Y ese señor, y esto sí lo conozco, quiso obligar a un técnico jurista a que informara a favor de la legalización de una nave industrial en Guaza que tenía 600 metros y ahora tiene 3.000. La querían legalizar aunque nunca tuvo licencia. Le pidió al concejal que destituyera a ese técnico. Delante de mí se lo pidió Luis García al alcalde, quien le advirtió de que se iba a quedar sin asesor jurídico. Este señor, además, no estaba muy de acuerdo con otro funcionario que sacó la plaza, muy buen profesional. Aún así, lo dejó de jefe y se ausentó por una baja.

Pero, entonces, ¿cómo es que se mantiene en el cargo a Damián Hernández?

Este señor no puede ser el jefe de la oficina técnica de Urbanismo. Es un error de Luis García. Pero lo que hizo Luis García fue subirle el sueldo unos 1.500 euros mensuales hace un año y pico porque se lo pidió. Luis [García] dio marcha atrás por la forma en que lo hizo. Luego le preguntaron a ese señor y negó que pidiera el aumento. Dejó a Luis García con el culo al aire. Pero no fue la primera vez. Ya fue cambiándole a Luis García todo lo que este pedía y finalmente, hace un mes, pide traslado en comisión de servicios y se va de baja.

En ese informe, Damián Hernández habla de una reunión en la que el alcalde convoca a Felipe Campos para hablar sobre un proyecto. El arquitecto critica que no se le convocara, aún siendo jefe de servicio, tilda la reunión de "tendenciosa" y asegura que lo sorprendente es que se convocara a un abogado cuya relación con este expediente no estaba acreditada, además de tener acceso a unos documentos en tramitación a los que solo podían acceder los redactores de esos expedientes. Asimismo, delante del alcalde, Hernández asegura que Campos presionó a los técnicos asistentes. ¿Cómo se explica esto?

Yo eso no lo conozco. ¿Cuál era el proyecto objeto de la reunión?

El del Centro Comercial Arts. Según Damián Hernández, no estaba acreditado a quién representaba Felipe Campos.

No lo sé pero creo que representa al empresario Santiago Puig, que tiene una parcela colindante pequeña que queda cerca del Arts.

¿Le parece normal que un abogado, externo al Ayuntamiento y que oficialmente no se sabe a quién representa, sea convocado por el alcalde para, en sede municipal, presionar a los técnicos del propio Ayuntamiento, conociendo además expedientes que están en trámite?

A Felipe Campos lo conoce todo el mundo en Canarias. Yo creo que no es solo Felipe Campos. Usted, como ciudadano, puede personarse y que le den la información.

Pero es que hablamos de algunos expedientes que no están concluidos.

No sé si eso sucedió o no.

El alcalde confirmó que esa reunión se celebró.

Bueno, es normal ¿no?

Pero no está acreditado, según el jefe de Disciplina Urbanística, a quién representaba.

Un ciudadano de a pie que viva aquí puede acudir al Ayuntamiento a informarse

Pero de ahí a que se reúna con el alcalde y los técnicos?

El alcalde está para atender a toda la gente que vaya al Ayuntamiento. Mire, yo conozco a Diego Cano, el promotor del Arts, que es el mismo promotor de la nave de Guaza que quiso legalizar. Diego Cano entró en esta operación después de que los propietarios de esos terrenos, donde antes había un chalé, consiguieran una licencia para un proyecto básico en la época de José Alberto Reverón, de Coalición Canaria, como alcalde. Ningún técnico quiso informar de ese proyecto pero consiguió la licencia por una decisión del contencioso-administrativo. Huele un poco raro que el Ayuntamiento no recurriera esa licencia cuando se sabía lo que iba a pasar.

¿Qué iba a pasar?

Conozco el expediente. Comienzan las obras y se hace un edificio que no coincide con el proyecto tal cual se le dio la licencia en aspectos como volumetría y altura. Y eso está confirmado porque tuvieron que reformar el proyecto para intentar legalizarlo. Ahí empieza el juego y ahí empieza algún técnico municipal a decir que sí se podía legalizar y otros que no. Vaya allí y mire la altura del edificio.

¿Qué opina de Diego Cano?

Estoy muy molesto con él. Lo conozco de hace muchos años e incluso he trabajado con él en el mercado inmobiliario. El otro día le escuché lanzar acusaciones a todos lados? Pensé: pero ¿qué está diciendo este hombre? Es que nos llamó mafiosos. Y me nombra a mí que llevo trabajando por Arona desde hace 69 años y que nací aquí? De mafiosos Diego Cano sabe mucho más que yo. Lo sé a ciencia cierta y lo repetiré donde quiera que sea.

El alcalde habló en un comunicado divulgado el miércoles de graves irregularidades protagonizadas por Luis García y un empresario que no cita pero que se interpreta que es Diego Cano.

Mena destituyó a Luis García porque perdió la confianza en él.

Pero ¿denunció esas graves irregularidades de las que habló? Porque no se tiene constancia, aunque sí de una denuncia contra García de Felipe Campos en Fiscalía, muy poco después de que el propio García también fuera a Fiscalía.

Lo único que sé es que ha habido un empeño por legalizar ese centro comercial en el área de Urbanismo. Y lo que sé es que desde hace cuatro meses la Fiscalía está investigando ese centro comercial.

Los empresarios que han denunciado extorsiones y coacciones hablan de todo lo contrario, de que las injerencias vienen presuntamente del abogado?

Opiniones, que puede haber muchas. Pero la realidad es lo que cuenta.

¿No cree que el alcalde de Arona está tardando en dar explicaciones?

Desde que esto surgió, Mena ha querido salir a dar explicaciones en una rueda de prensa. Pero el partido le ha dicho que no entre en guerras con compañeros y que tenga cautela. Es que es Arona, un municipio de casi 100.000 habitantes? Es un pueblo que necesita caminar, prosperar. Y unos presuntos delincuentillos no van a paralizar Arona, que ya lleva bastante tiempo paralizada. Esto va a caminar. Que quede claro.

¿Cuándo hablará Mena?

Hablará después de que terminen unas negociaciones para tratar de resolver la división en el seno del gobierno municipal.

¿Se refiere a la intervención de la Ejecutiva Federal?

No. Sobre eso estamos pendientes del diagnóstico que hagan. Hablo de negociaciones en el seno del PSOE de Arona.

¿Cree que la mejor solución es que se vayan Mena y García?

No. Aquí no tiene que irse nadie.

¿Y cuál sería la solución ante el cisma de un grupo de gobierno partido en dos: siete menistas y siete menistasgarcistas

La solución es hablar con Luis García, que ha sido caprichoso y desleal con el alcalde. Y lo sé porque he estado no en una, ni en dos, ni en cuatro; en veinte reuniones. Y son unas divergencias que no solo tienen que ver con el Arts. El Arts es lo de menos. Es que estamos hablando de todo un Plan General, que es un desastre heredado de Coalición Canaria.

¿Usted qué opina de Luis García, el concejal destituido cuya marcha ha partido el grupo municipal en dos?

Es una persona excelente pero aquí ha habido alguien que lo ha llevado a donde no tenía que ir.

Lo cierto es que lo que está ocurriendo espanta a los inversores y al desarrollo, en un momento en el que tanta falta hace.

Eso decía precisamente Diego Cano en unas declaraciones que le escuché. Voy a ser claro en este punto: lo mejor es que inversores como Diego Cano no vengan a Arona. Porque en aquellos lugares donde esté el PSOE no va a haber pelotazos urbanísticos. El alcalde, en primer lugar, y este que le habla no vamos a permitir ilegalidades en Arona. No queremos jaleos, sino trabajar por el pueblo.

¿Usted confía en el alcalde?

Totalmente. Hasta el momento confío al cien por cien.

¿Cree que es ético y estético que tenga un asesor investigado por delitos relacionados con la corrupción, como es el caso de Nicolás Jorge?

Sí, porque es una persona honrada y transparente. Su nombramiento es legal.

¿Pero es ético, insisto?

Sí porque es un chico serio. Es legal, ¿no? Pues ya está. Lo conozco bien, desde que estaba en las juventudes socialistas. Nicolás Jorge es un tipo buenísimo, una persona honrada.

Pero ahí está lo que ocurrió cuando fue edil en Granadilla?

No conozco lo que pasó en Granadilla. Me da mucha rabia que incluso hayan dicho que fue condenado, cuando no lo ha sido. Me indigna. Ese señor tiene que vivir y comer. Y no está condenado. Su caso lleva 15 años de instrucción. Esas acusaciones forman parte de la política asquerosa que hacían los que estaban antes.

¿Cree que es correcto que un constructor y hotelero como usted sea presidente del comité local de un partido, en este caso el PSOE de Arona?

Los empresarios sucios actúan sin dar la cara. Yo doy la cara militando en un partido político. Nací en Arona, me crié en un pueblito de La Gomera, Arure, cuidando cabritas y comiendo lo que había cuando no había, y tuve unos padres -mi madre todavía vive- que me dieron una educación simple y sencilla que se basaba, entre algunos principios, en que lo ajeno no se toca. Siempre me inculcaron el respeto a los demás y seguiré siendo así hasta el último día. Ni he metido la mano en la lata ni la meteré.

¿Le ha beneficiado empresarialmente su trayectoria política?

Nunca he necesitado meterme en un chanchullo. Mire, voy más allá: mi actividad política me ha perjudicado, ha perjudicado a mis empresas y me ha quitado mucho tiempo que debí dedicarle a mi familia. Pero he seguido en política. ¿Sabe por qué? Porque me gusta la política y practicarla con honradez y dignidad. Soy una persona coherente serie que jamás he robado a nadie.