La Organización Mundial del Turismo (OMT) de Naciones Unidas avala y pone de ejemplo las medidas que el sector turístico canario ha puesto en marcha para hacer de las Islas un destino seguro frente a la pandemia del coronavirus. "Los números lo dicen todo. A día de hoy, yo no viajaría a América, pero sí a Italia y a Canarias porque yo también quiero proteger a mi familia, a mis amigos y a mi entorno", explicó el secretario general de la OMT, Zurab Pololikashvili, que ayer aterrizaba con una comitiva de 120 técnicos de este organismo, agentes de viajes europeos y cuarenta periodistas que testearán durante casi una semana los protocolos sanitarios etablecidos en las ocho islas. Una serie de medidas ideadas por el sector público y privado que se recogen en el proyecto 'Canarias Fortaleza', que ayer se desgranaba en el Consejo Canario de Turismo al que también acudió la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, junto con el presidente del Gobierno regional, Ángel Víctor Torres, y la consejera de Turismo, Yaiza Castilla.

"La OMT celebra los pasos dados por Canarias para reiniciar el turismo de manera responsable", aseguró Pololikashvili, ?que aunque aclaró que eso no significa que el virus haya desaparecido, sí que garantiza que el riesgo de ser infectado sea mínimo. Por ello, el mensaje que Naciones Unidas traslada con esta visita es el de que Canarias es un destino abierto y seguro que podría volver a la normalidad en unos cuatro meses y donde los turistas se encontrarán con un control bien organizado y sin barreras que les hagan sentir incómodos.

Un plan para el Archipiélago

Precisamente, esto es lo que persigue 'Canarias Fortaleza', un programa elaborado con la participación de los principales agentes del sector con el objetivo de rediseñar todos y cada uno de los eslabones que conforman la experiencia vacacional. Un equipo técnico multidisciplinar organizado en 18 grupos de trabajo lidera la misión de analizar y aplicar de manera inmediata las mejores propuestas de seguridad sanitaria que se están desarrollando en Europa y en el resto del mundo. Tras conocer las líneas maestras de este proyecto, la ministra Reyes Maroto alabó la fluidez de la colaboración público-privada en las Islas a la hora de "elaborar unos protocolos orientados a mejorar el modelo turístico que han conseguido que la OMT sitúe a Canarias como un destino seguro en el mundo".

Con "los deberes hechos" por parte de las instiuciones y empresas canarias, el Gobierno central y Bruselas deberán completar esta estrategia con las herramientas económicas necesarias. Para ello, la ministra se comprometió a defender frente a la Comisión Europea un plan de inversiones específico para el Archipiélago, tanto por su alta dependencia económica del turismo como por su condición de Región Ultraperiférica (RUP).