El Cabildo de Tenerife y la Cruz Roja han decidido, ante la finalización del estado de alarma y los datos positivos de evolución de la covid-19 en la Isla, llevar a cabo el desmantelamiento del hospital de campaña que, desde el pasado mes de marzo, se encontraba instalado en el Recinto Ferial de Tenerife en previsión de un aumento de casos y como refuerzo a los hospitales de referencia tinerfeños.

En una nota de prensa, el presidente del Cabildo, Pedro Martín, resaltó "la dedicación y profesionalidad del personal encargado de este hospital, que ha hecho un trabajo excelente, y desde la corporación insular agradecemos enormemente este esfuerzo al igual que a todo el equipo de Cruz Roja", a lo que añadió que, "afortunadamente, ha sido una instalación que no hemos tenido que utilizar".

Asimismo, destacó que la vuelta a la normalidad ha permitido ya abrir las residencias de mayores a las visitas controladas bajo protocolo por parte de los familiares.

Por su parte, el consejero de Desarrollo Sostenible y Lucha contra el Cambio Climático, Javier Rodríguez Medina, encargado de coordinar las labores con el Servicio Canario de la Salud (SCS) y con Cruz Roja, advirtió de que "hemos decidido dejar preparadas las instalaciones de saneamiento, de suministro de agua e instalaciones eléctricas específicas para que esta instalación pueda estar en servicio, si fuera necesario, en menos de 48 horas".

Este hospital de campaña estaba compuesto por tres módulos o islas de 60 camas, y cada una de ellas formada por ocho grupos de ocho camas a modo de habitaciones, hasta un total de 180 camas. Se trataba de una infraestructura modular de más 12.000 metros cuadrados, que finalmente no resultó necesaria.