La presencia de dos activistas en las grúas de las obras de un hotel que se construye junto a la playa de La Tejita, en Granadilla (Tenerife) evidencia "la necesidad de cambiar el actual modelo turístico y económico", según IUC, que ha mostrado su apoyo a la protesta.

Los dos activistas se subieron a las grúas en la mañana del 16 de junio y seis días después mantienen que no bajarán hasta que no se paralicen las obras, que siguen adelante.

Lo prioritario, según el coordinador insular de IUC, Juan Borges, es la protección del territorio, no las disputas competenciales de la Comunidad Autónoma y el Ministerio de Transición Ecológica, que no tienen ningún efecto práctico sobre esta situación.

"Mientras en Canarias no haya una voluntad clara de reconsiderar el modelo turístico actual no se resolverá el problema que a toda la población de las islas nos importa, la protección del territorio", indica Borges en un comunicado.

En su opinión, "hay que redefinir el modelo turístico actual, totalmente invasivo, destructor del medio costero y altamente contaminante".

La reforma de la Ley de Costas, denuncia el dirigente de IUC, no pretende proteger el paisaje y sus valores naturales, sino las plusvalías, y "tampoco ayuda que algunos ayuntamientos expidan licencias en parajes naturales protegidos".

Para Borges, la economía de Canarias "no puede estar al servicio exclusivamente de los grandes grupos empresariales", sino atender a la conservación del paisaje, de los espacios protegidos y de todos los recursos naturales, sin renunciar a un turismo sostenible.