El presidente del Cabildo de Tenerife, Cabildo de TenerifePedro Martín

En declaraciones a los periodistas tras reunirse durante más de una hora de forma telemática con la ministra de Turismo, Reyes Maroto, ha reducido a una "especulación" la propuesta del Gobierno de Canarias de realizar test en destino a los turistas --con un coste anual aproximado de unos 40 millones-- hasta que la UE defina las normas en el subsector turístico.

"El Gobierno quiere que contribuyamos todos", ha indicado, si bien ha avanzado que probablemente se vaya a fijar un protocolo de seguridad sanitaria nacional para todas las comunidades "y sin test", porque "no tiene sentido" que haya unas normas para unos territorios y otras distintas para otros.

En ese sentido, la ministra le ha trasladado que se baraja hacer control de temperatura a los turistas, hacer un "seguimiento" de donde se alojan o qué actividades se realizan, "por donde se van a mover" o suscribir declaraciones responsables, "que no es cualquier cosa" porque si la persona que firma lo incumple puede incurrir en "problemas penales".

Martín entiende que "hay que conjugar seguridad y legalidad" y también "buscar soluciones" para que cuando se presenten casos positivos en la isla.

"Otra cosa", ha añadido, es colaborar con la repatriación de los turistas que den positivo, campo en el que ya empiezan a explorar las compañías de seguros.

El presidente tinerfeño también le ha planteado a la ministra que hagan el "control" de los precios de los vuelos entre Canarias y la Península pues son una "barbaridad" e impiden reactivar el mercado nacional con fuerza.

Sobre los ERTE, ha valorado que Reyes Maroto está abierta a que si se prorrogan se extiendan a otras actividades económicas vinculadas al turismo como los transportes o las empresas de ocio y servicios pues hay que tener una "visión más realista" del impacto que ha tenido la crisis sanitaria en la economía canaria.

Alemania y Reino Unido potencian el turismo interno

Martín ha advertido también de que hay "elementos que juegan en contra" de la reactivación del turismo en el archipiélago como el hecho que en Alemania y Reino Unido se está incentivando a los ciudadanos a que se queden en su país" pues las autoridades no se harán responsables de un traslado si se contagian de coronavirus en el destino.

"Es una llamada para hacer turismo interno y no juega a nuestro a favor", ha señalado, especialmente con los turistas de más de 50 o 60 años, que son repetidores en Tenerife y ahora están "preocupados".

Además, ha comentado que la ministra le ha transmitido que la pandemia ha adelantado los planes para mejorar la digitalización de los destinos turísticos.

Cuestionado sobre el hecho de que Baleares haya sido la primera comunidad autónoma en adelantar la llegada de turistas extranjeros antes de la apertura de fronteras, ha comentado que se alinea con la posición del Gobierno de Canarias de no precipitarse y ser "cautelosos" e ir definiendo los protocolos de actuación en caso de que haya nuevos brotes.

En cualquier caso, ha comentado que la apertura de fronteras es "inminente" y esera que todo el subsector turístico y las administraciones públicas estén preparadas.