El presidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín (PSOE), ha anunciado este viernes que el Estado cofinanciará junto a la corporación insular la construcción de un nuevo plan comarcal con cinco estaciones depuradoras, un hito "fundamental" para la isla por su alcance medioambiental y agrícola.
Durante el debate del estado de la isla, Martín ha añadido que, de acuerdo con el Estado, se construirán cinco grandes depuradoras para abordar el "complejo" problema del tratamiento de aguas, suprimir los vertidos "incontrolados" y disponer de más aguas regeneradas para el sector primario.
Las obras se realizarán en Granadilla, en las comarcas suroeste de Tenerife y de Acentejo, en el valle de La Orotava, en Arona y San Miguel, unas infraestructuras que tendrán una capacidad de 16,1 millones de metros cúbicos de agua depurada.
Esto supondría, según Martín, un aumento del 53 % en la actual capacidad depurativa de Tenerife, y se dará "un paso de gigante" en un "polémico" problema hídrico de difícil solución.
"Y probablemente influirá en la bajada de tarifas que se apliquen a los consumos y de los que, habitualmente, los agricultores son especialmente sensibles, quienes afrontan una situación muy complicada: o carencia de agua o precios elevados de las aguas de calidad", ha añadido el presidente insular.
El corte del suministro de agua regenerada hacia el sur de la isla, ocurrido en agosto del año pasado, evidenció, en su opinión, la carencia de agua para los cultivos, un problema antiguo en la isla, o la incompleta red de estaciones depuradoras que compensen los "menguantes" acuíferos.
El gobierno del Cabildo insular ha realizado además un anuncio de mercado para disponer de un edificio al que trasladar a los residentes actuales en Febles Campos, la instalación "en peor situación" de toda la red insular.
Pretenden con ello encontrar una alternativa al edificio reformado en cabo Llanos que se propuso en la anterior legislatura para alojar a los ancianos.
Para Martín resulta "evidente" en esa línea la carencia de plazas asistenciales para las personas mayores y la insuficiencia y el mal estado de las instalaciones actuales, especialmente los centros de Güímar, Ofra y Febles Campos.
Además, el Cabildo ha llegado a un acuerdo con el Gobierno de Canarias para impulsar el proyecto de la vía alternativa en la TF-5 entre Guamasa y la avenida Lora y Tamayo, que pretende descongestionar la zona de mayor complicación de tráfico de la autopista.
El Ejecutivo insular sacará a concurso dos obras más en los próximos meses, también en la TF-5: la nueva vía de Guamasa, a la que ya ha dado el visto bueno AENA, y la mejora de la rotonda del Padre Anchieta, que implicaría una reorganización de las conexiones, porque en este punto se generan un "cuello de botella" de la movilidad.
Dos obras que, entre otras, subrayan el hecho de que, a principios de junio, según datos que ha citado Martín, la corporación ha alcanzado un 32 % de nivel de ejecución de obras, pese a las paralizaciones debidas al estado de alarma por pandemia, "casi el doble" con respecto al año pasado, cuando gobernaba aún CC.
Con respecto al transporte público, el presidente tinerfeño ha insistido en que ya se ha iniciado el expediente de contratación para comenzar el plan de movilidad sostenible de Tenerife, que contendrá un análisis de la situación en la isla, propuestas de actuación o métodos de evaluación adecuados, entre otros aspectos.
"Nos parece importante este plan por necesario, pero también porque no había ninguna iniciativa en este sentido desde el fallido plan especial de ordenación de transporte de Tenerife, allá por el año 2012, y que no se llegó ni a aprobar definitivamente", ha recordado el mandatario insular.
Pedro Martín ha recalcado asimismo que se ha comenzado a modernizar la gestión del propio Cabildo y a implantar nuevas tecnologías como elementos "fundamentales" para ello, un proceso que parte de una "escasa o nula" vinculación informática entre los departamentos de la corporación.
