El director insular de Carreteras del Cabildo de Tenerife, Tomás Félix García Pérez, anuncia que la intención de su departamento es reabrir al tráfico los dos carriles de la TF-5, a la altura del mirador realejero de La Grimona, "a finales de la próxima semana". En estos días se ultiman los trabajos de instalación de los anclajes de las barreras dinámicas y de reparación de los muros y el firme en un tramo afectado por los desprendimientos de los días 6 y 7 de mayo, que han obligado a interrumpir el tráfico en esta vía clave para el Noroeste durante más de un mes.

Si todo marcha según lo previsto por el Cabildo tinerfeño, a finales de la próxima semana, probablemente entre los días 19 y 21 de junio, se reabrirá el carril de la TF-5 en dirección Santa Cruz, ya que en la actualidad sólo se permite el paso en dirección a Icod de los Vinos y la Isla Baja.

Las obras en la ladera están prácticamente concluidas y los esfuerzos se centran ahora en reparar los daños causados por la caída de rocas por los desprendimientos y los trabajos posteriores. Se está reparando el muro más cercano a la ladera y, en los próximos días, "se asfaltarán toda la zona de nuevo".

García Pérez reconoce que ha sido una obra "complicadísima" debido a la orografía, el peso de los materiales y la imposibilidad de trabajar con muchas personas en una zona tan escarpada. Dificultades a las que se han unido la pandemia del Covid-19 y las limitaciones del estado de alarma.

La previsión de coste inicial de estos trabajos de emergencia se cifró en unos 275.000 euros, pero el precio final no se podrá saber hasta que finalice la obra, según explicó García.

Después de la polémica con Los Realejos y de la negativa inicial del Cabildo a regular el tráfico en ambos sentidos "por el elevado riesgo de choques por alcance", las ventanas horarias para vehículos pesados están funcionando de forma satisfactoria. Pasan una media diaria de cien, la mayor parte en la ventana de las 12:00, cuando se concentran entre 40 y 45. En los otros tres horarios, la media de vehículos es de 15.

El vicepresidente primero y consejero insular del Área de Carreteras, Movilidad e Innovación, Enrique Arriaga, coincide con García en que la siguiente iniciativa a ejecutar en esta zona de riesgo será "la ampliación de los túneles actuales para garantizar la seguridad de los usuarios de la vía". Carreteras trabaja en un pliego conjunto para la redacción del proyecto y la ejecución de la obra por parte de empresas especializadas.

La intención del Cabildo es sacar esta obra a licitación en torno a septiembre, de manera que pueda iniciarse en 2021. Se trabaja con la previsión de que la ampliación de los túneles pueda concluir "a finales del año próximo o principios de 2022".

Además, se buscan soluciones técnicas para evitar afecciones al mirador de La Grimona y al acceso a un establecimiento de turismo rural que está proyectado en esta zona de la costa de Los Realejos.