El Cabildo de Tenerife reforzará el operativo contra incendios forestales en la Isla ampliándolo hasta ocho meses al año, para adaptar la respuesta de la lucha contra el fuego a la nueva situación climática, que ocasiona temperaturas más altas y un menor grado de humedad. De esta manera, a la campaña se incorporarán 40 efectivos más y también se mejora la dotación con nuevos vehículos, siete cañones de alta presión y dos depósitos portátiles de agua.

Así lo confirmó ayer el presidente del Cabildo insular, Pedro Martín, quien advirtió que con este dispositivo, al que la Corporación tinerfeña ha destinado 3,6 millones de euros, se trata de "cubrir las carencias que se habían detectado en los últimos años". El mandatario considera fundamental cambiar el criterio que antes reducía los periodos de riesgo a solo cuatro meses al año. En 2020, el operativo se extenderá durante ocho meses, iniciándose el pasado mes de abril y terminando en diciembre.

Esta campaña el operativo contará con seis nuevos vehículos 4x4 y dispondrá también de siete cañones de alta presión, que se conectarán a la tubería de la dorsal de cumbre de la Isla. Además, se incorporarán dos depósitos portátiles de agua de 20.000 litros, que permitirán a los helicópteros cargar desde diferentes ubicaciones, en circunstancias en las que no puedan desplazarse hasta los embalses debido a las condiciones meteorológicas.

También por primera vez, se ha ampliado el servicio del Centro de Coordinación del Operativo Insular (Cecopin) que permanecerá activo las 24 horas durante los 365 días del año. Algo que valoró especialmente la consejera de Gestión del Medio Natural y Seguridad, Isabel García, quien señaló que se trata de una iniciativa necesaria ya que "la elevación de las temperaturas a lo largo de todo el año es evidente".

García explicó que en el operativo contra incendios de este año el Cabildo ha invertido 840.000 euros más para "ponerlo al día respecto al cambio climático, que es ya una realidad". Asimismo, García también detalló que se ha reforzado además el operativo especial que se desarrolla en el Parque Nacional del Teide, sumando 80.000 euros más para poder extenderlo desde junio hasta octubre.

El jefe de la Unidad Incendios Forestales y Medios Asociados del Cabildo, José María Sánchez, advirtió durante la presentación que este año ha sido en la Isla "moderadamente seco", ya que los niveles de precipitaciones han estado por debajo de la media, lo que ocasiona un estrés hídrico en la vegetación que favorece que se convierta en combustible para las llamas.

Esta situación inicial podrá verse agravada si a lo largo de los próximos meses llegan muchos periodos de calima y altas temperaturas que favorezcan la capacidad de ignición. Sánchez afirmó que la mayor parte de los incendios están provocados por personas que actúan de forma negligente, por lo que el Cabildo recuerda a la población que debe tener precaución.

De esta manera, durante este verano se activarán 305 trabajadores, de los que 162 son personal propio del Cabildo. Entre los medios disponibles habrá dos helicópteros Ecuriel AS350 B3 con base en el aeropuerto Tenerife Sur, con capacidad para cargar 1.000 litros de agua cada uno. El operativo dispondrá también de tres autobombas nodriza de 9.000 litros, 14 autobombas forestales con capacidad de 3.500 a 5.000 litros, dos autobombas medianas con capacidad de 1.800 litros, 25 autobombas ligeras pick-up de 500 litros, un vehículo de Puesto de Mando Avanzado y 29 vehículos todoterrenos de transporte.