¿Cómo han afrontado desde su sector el estado de alarma y todas las medidas derivadas?

Con mucha profesionalidad y templanza, por parte de todos y siguiendo las medidas señaladas por la Administración.

¿Recuerda aquellos primeros momentos de hace casi ya dos meses?

Fueron momentos de gran incertidumbre. Al problema sanitario se le sumaba el problema de cómo afectaría la nueva situación de alarma a la empresa y a su personal.

¿A qué situación se han visto abocados a raíz de la pandemia?

La Construcción y en concreto la Obra Pública no ha visto alterado su día a día, salvo en el refuerzo de las medidas de prevención y su estricto cumplimiento. Somos el mismo número de empleados y esperamos poder mantenernos así.

¿Es compatible seguridad y construcción?

En mi opinión depende de la actividad de construcción a que nos refiramos. Lo que es obra nueva y obra pública, si se puede hacer compatible. En espacios cerrados y habitados, no. Considero que ha sido muy acertada la diferenciación hecha por el Gobierno.

¿Está satisfecho con el apoyo y el asesoramiento financiero que ha recibido por parte de entidades y organismos públicos?

No creo que se pueda generalizar. La reacción de alguna entidad, en concreto BBVA, ha sido mucho más proactiva que otras. Nos ha demostrado su apoyo desde el minuto uno, lo cual en momentos así de duros es de agradecer.

¿Cómo vislumbra el futuro del sector y qué demandaría?

La Construcción es un sector que ya empieza a estar acostumbrado a crisis cíclicas devastadoras. Como la afrontemos dependerá en gran medida de si las Administraciones Públicas pueden mantener los planes de inversión y que medidas se tomen para facilitar la construcción de viviendas. Esta crisis no es ocasionada por ninguna burbuja, ni es específica de un sector determinado. Es una crisis global que nos afecta a todos, y por ello requerirá del esfuerzo de todos para poder superarla.