El consejo de Gobierno del Cabildo adjudicó ayer dos obras de saneamiento y abastecimiento de agua en La Orotava y Santa Úrsula. Ambas actuaciones, que emanan del área de Cooperación y Vivienda -que dirige Zebenzuí Chinea-, forman parte del plan de choque para atender la emergencia social de la crisis del coronavirus y supondrán una inversión total de más de 1,2 millones de euros y la contratación de 100 trabajadores.

En el caso de la intervención a realizar en La Orotava, será la empresa Señalizaciones Villar la que ejecute la segunda fase del proyecto de tratamiento de aguas residuales de la urbanización Las Palmeras, por 827.219,46 euros. Mientras, Canaragua Concesiones acometerá la obra de acondicionamiento de varios depósitos de abastecimiento de agua en Santa Úrsula, lo que supondrá una inversión de 337.967,47 euros

Chinea precisa que ambas actuaciones supondrán un "alivio" en la zona norte de la Isla. Se prevé que comiencen en escasos días y tendrán una duración de 10 meses, en el caso de La Orotava, y de cuatro, en Santa Úrsula. "En un momento en el que la economía global está resentida, debemos ser eficaces y favorecer todas aquellas actuaciones que, desde el Cabildo, podamos dar salida para generar, sobre todo, empleo", ha afirmado.

Ambas obras forman parte del Plan de Cooperación Municipal 2014-2017, siendo la de saneamiento del municipio villero financiada en un 80% por la Institución insular y un 20% por el Consistorio. La mejora de los depósitos que se ejecutará en Santa Úrsula se financiará en un 90% por el Cabildo y en un 10% por el ayuntamiento.

Asimismo, Planificación del Territorio, Patrimonio Histórico y Turismo desarrolla la obra que dotará al casco de Puerto de la Cruz de una red de descarga de caudales de aguas pluviales diferenciada de la de aguas residuales.

El objetivo de esta actuación es disminuir los riesgos de inundaciones de las calles y crear un nuevo punto de vertido en la zona del muelle, al que precederá un sistema de limpieza que evita la acumulación de flotantes y sedimentos. La obra tiene un coste de 266.684,46 euros, aportados íntegramente por la institución insular, y servirá para recoger el agua de la lluvia en el tramo final de la calle Santo Domingo, la calle Quintana, Iriarte, Las Damas y uno de los tramos de la calle Valois. Todo ello desembocará en el nuevo punto de vertido en la zona del muelle.

El consejero insular Martín Plata asegura que la práctica inexistencia de tráfico en la calle Santo Domingo favorece el desarrollo de los trabajos, hasta el punto que podría completarse según lo previsto, "entre finales de junio y principios de julio".