La Semana Santa de La Orotava es referente en el Archipiélago. Es habitual la presencia de fieles y turistas que se acercan a la Villa para admirar esta celebración. Pero este año, debido al estado de alarma decretado por la pandemia no se puede vivir como se ha hecho a lo largo de la historia en los centros religiosos y calles del municipio, pero sí se vive con Fe e intensidad dentro de muchos hogares. Son días de reflexión.

Actualmente está en trámite su declaración como Fiesta de Interés Turístico de Canarias. Este reconocimiento pondría en valor también la labor desinteresada de muchos vecinos, colectivos, hermandades, cofradías y parroquias que, a lo largo de la historia, han sabido conservar el gran legado patrimonial que constituye la Semana Santa de La Orotava. Y, por otro lado, contribuirá a una mayor proyección del municipio, valora el alcalde Francisco Linares.

La Semana Santa de La Orotava no se celebra por parroquia, sino es en realidad la Semana Mayor Villera. Hay una treintena de procesiones y medio centenar de pasos, destacando que no hay grupos escultóricos, excepto cuatro casos que son indivisibles: La Oración en el Huerto, El Nazareno con el Cirineo, La Piedad y el Cristo del Despojo. Entre otras procesiones cabe destacar la del Viernes de Dolores; el Señor del Despojo, el sábado; Domingo de Ramos las del Señor del burrito, el Señor Predicador y el Cristo del Huerto; el Santísimo Cristo de la Cañita (Lunes Santo); Las lágrimas de San Pedro (Martes Santo); Santísimo Cristo de la Humildad y Paciencia (Miércoles Santo); El Mandato y Santísimo Cristo a la Columna (Jueves Santo); El Encuentro, El Calvario, El Santo Entierro y del Silencio (Viernes Santo) y del Santísimo Sacramento (Domingo de Resurrección).

En La Orotava aún perviven hermandades centenarias como es el caso de la Hermandad del Santísimo Sacramento de la Parroquia de La Concepción, que es la primera de la Villa, creada en 1503. Más tarde, en 1560, en el Hospital de la Santísima Trinidad se funda la Cofradía de la Santa Vera Cruz y Misericordia. En 1681 surge la Hermandad Sacramental de la Parroquia de San Juan Bautista y en 1758 se crea la Hermandad de la Venerable Esclavitud del Santísimo Cristo a la Columna. Mientras que en 1864 se funda la Hermandad del Calvario, una de las más numerosas de cuantas desfilan en la Semana Santa villera. Otra cofradía con historia es la de Nuestro Padre Jesús Nazareno. Y ya en el siglo XX surgen otras como la Cofradía de Damas de Virgen de Gloria (1954); la Franciscana Hermandad del Santísimo Cristo del Huerto (1982); Hermandad del Santísimo Cristo de la Humildad y Paciencia y Santísima Virgen de los Dolores (1989), hasta las más recientes.