En tiempos de coronavirus muchas empresas han optado por reinventarse y adaptarse a las necesidades del mercado. La demanda mundial de materiales de protección para combatir al Covid-19 ha provocado que algunas compañías canarias quieran aportar su granito de arena dedicando parte de su producción a la fabricación de algunos de estos bienes. Es el caso de Ascanio Química, una empresa tinerfeña de almacenamiento, suministro y distribución de una amplia gama de productos químicos y materia prima industrial, capacitada para hacer geles hidroalcohólicos. Tiene los materiales, tiene la maquinaria, y tiene al personal listo para ponerse a trabajar. Solo hay un problema: no tiene la autorización del Ministerio de Sanidad.

La empresa, con más de 35 años de antigüedad en el sector, lleva semanas esperando una respuesta que todavía no ha llegado a pesar de que cuenta con todos los papeles en regla y cumple con las condiciones de producción. La compañía química ha optado por dejarle la gestión de la petición a un consultoría catalana en vista de que hasta ahora la Agencia española de medicamentos y productos sanitarios no ha contestado a su reclamo. "Parece que al Estado no le interesa el trabajo de las pymes, solo el de las grandes empresas", critica el gerente de Ascanio Química, Andrés Calvo.

La burocracia mantiene en espera la producción, pero esto no ha frenado que la compañía química ya haya planificado el resto de factores involucrados en la fabricación. La empresa esperaban ponerse en marcha lo antes posible por lo que se concretó que la primera partida de los productos llegara en avión y el resto a través de barcos.

Calvo asegura que la cantidad de material comprado permitiría hacer en "muy poco tiempo hasta 40.000 kilos de gel hidroalcohólico". Con un ritmo diario de uno 4.000 kilos, que podría ser mayor si el mercado así lo requiere. "Es un producto que no solo necesitan los sanitarios, sino que lo precisan desde todos los sectores", apunta el gerente de la química. La compañía, además, no descarta donar parte de su producción a colectivos que lo necesiten en Canarias.

Si consiguen la autorización sería la primera vez que Ascanio Químicas produce geles hidroalcohólicos, por lo que los trabajadores ya han realizado pruebas de producción en el laboratorio y se han establecido nuevas medidas de protección para estar en contacto con los producto que son altamente inflamables. La base principal, el alcohol sanitario, se lo han comprado a la empresa canaria Arehucas, y el resto -glicerina y peróxido de hidrógeno- lo han adquirido a través de sus proveedores en la Península y Europa.

La demora en la aprobación de la autorización preocupa a la química ya que "si no le dan la oportunidad a los fabricantes canarios el producto llegará de fuera", según indica Calvo, quien asegura que la situación debe servir para reflexionar sobre la dependencia productiva que tiene el Archipiélago del resto del mundo. "No habría escasez de productos sin los fabricáramos directamente en las Islas", apunta el gerente.

La empresa química también ha adaptado algunos de sus productos de limpieza para combatir la propagación del Covid-19. De forma que ha creado nuevos desinfectantes que acaban con el virus en las calles. Un producto que está teniendo mucho éxito entre las pequeñas y medianas empresas y que está sirviendo a la fabrica para salir adelante ante la imposibilidad de ponerse a trabajar en la creación de los hidrogeles.

En el Archipiélago hay otras fábricas que ya han logrado la autorización del Ministerio de Sanidad para producir geles hidroalcohólicos. Un ejemplo es el de la empresa dedicada al desarrollo de productos elaborados con Aloe vera, Lanzaloe, quienes consiguieron el permiso a través de la Delegación del Gobierno en las Islas. Según explica Calvo este caso fue más sencillo ya que se trata de una empresa cosmética y los pasos a seguir son "menos complejos" que en el caso de una industria química.