El alcalde de Los Realejos, Manuel Domínguez El consistorio se une a las comisiones de fiestas y cancela todos los actos previstos para estos festejos de interés turístico nacional. Y el alcalde lanza una advertencia muy importante para un municipio que se define como "el más festivo de España", con más de 80 celebraciones anuales: "Al día siguiente de la finalización del estado de alerta que nadie espere que se permitan celebraciones masivas, tendremos que ir recuperando todo de forma paulatina".

La suspensión de las fiestas más esperadas del año para los realejeros es "una decisión difícil, pero responsable", en palabras de Domínguez, en un contexto mundial que tendrá consecuencias a medio y largo plazo. Sin querer anticiparse a las decisiones del Gobierno de España, el alcalde dejó entrever que es posible que también se tengan que suspender otros festejos posteriores, como los de la Virgen del Carmen.

Alimentos en una romería

El alcalde se pregunta qué cambios habrá que aplicar a partir de la pandemia del coronavirus y planteó, como ejemplo, si será posible "seguir manipulando los alimentos como siempre durante una romería". O cuándo será posible volver a celebrar un baile de magos con miles de personas llenando las calles del casco de Los Realejos, "como ocurrió en 2019".

Tras emitir un vídeo en el que los portavoces de los diferentes colectivos que hacen posible esta fiesta justificaban su decisión de suspenderlas hasta 2021, el alcalde reconoció que esta medida se acordó "hace unos días" con estas mismas asociaciones, "justo en el momento en el que se debían iniciar todos los trámites para su correcta organización".

Logística imposible

La logística también hacía imposible celebrar el tradicional pique pirotécnico entre las calles El Sol y El Medio, puesto que una de ellas debe traer los fuegos artificiales desde Valencia y eso requiere unos plazos inamovibles. El Festival Folclórico Siete Islas, al que acuden grupos de toda Canarias, también resulta inviable, como el multitudinario baile de magos o la concurrida romería.

El alcalde reconoció el trabajo y la responsabilidad de las Asociaciones Culturales Cruz Calle El Sol y Cruz Calle El Medio; la Asociación de Fiestas de la Santa Cruz de la Cruz Santa, y la Comisión de la Cruz de la Iglesia 2020. Así como su valentía por tomar una decisión que no ha sido "nada fácil".

"Es la primera vez en la historia que se suspenden nuestras fiestas, pero también es la primera vez en la historia que vivimos una situación como la actual", subrayó Domínguez, quien confía en que la población entienda y comparta esta difícil decisión. "No podíamos esperar y, a partir del levantamiento del estado de alarma, invitar a la ciudadanía a congregarse en la calle en masa", explicó el alcalde realejero

El alcalde lamentó el gran impacto económico que esta suspensión tendrá en muchas empresas locales. Unas pérdidas que el consistorio aún no ha podido estimar. "No hacemos un anuncio positivo y sabemos que será complicado, pero debemos mirar ya al año 2021. Valoramos todas las alternativas, pero aún hay muchas preguntas sin respuesta", indicó.

Los Realejos no se planteó en ningún momento un cambio de fecha de sus fiestas de mayo: "En nuestro calendario festivo no cabe el aplazamiento de una fiesta que dura más de 31 días, pero tampoco tendría sentido". Ni siquiera podían plantearse esperar más tiempo, como están haciendo algunos municipios, "ya que el peso específico y la complejidad de estas fiestas no lo permiten".

"Que la acepten y comprendan"

"Esperamos que la gente valore esta decisión con responsabilidad. Que la acepte y la comprenda. A nadie se le escapa que este gobierno es un gran defensor de las fiestas y de las tradiciones, como ya demostramos cuando llegamos al ayuntamiento en 2011, en medio de una gran crisis económica", recordó Domínguez.

El alcalde realejero agradeció a todos y cada uno de los que hacen posible las fiestas su implicación y responsabilidad. Reconoció su "profundo sentimiento de tristeza", pero abrió la puerta a que el 3 de mayo de 2020 tenga, al menos, una simbólica muestra de fuegos artificiales en honor a la cruz. "No me puedo imaginar un tres de mayo sin fuegos en Los Realejos y, aunque sea un volador o una lluvia, trataremos de que se haga algo. Las fiestas están suspendidas y no habrá pique pirotécnico, pero debemos debatir internamente qué podemos hacer, aunque sea algo simbólico", anunció.