La iniciativa de médicos del Hospital Universitario de Canarias (HUC) de acudir al Diputado del Común para que los ayuntamiento de Icod de los Vinos, San Juan de la Rambla y La Guancha incrementen las medidas de seguridad y protección de los participantes en la tradición de las Tablas de San Andrés tiene su origen en tres casos muy graves de menores de edad que terminaron en los quirófanos del HUC entre 2018 y 2019. El neurólogo infantil Pablo Febles reconoce a EL DÍA que dos de estos menores estuvieron cerca de perder la vida y un tercero, que sufrió la amputación parcial de la rodilla, tendrá secuelas el resto de su vida.

"No es lógico que se obligue a utilizar casco a los menores de 16 años que van en bicicleta por la calle y, sin embargo, no se regule su uso en una actividad como el arrastre de las tablas, en la que los menores se suben a un elemento que adquiere gran velocidad en calles de elevada pendiente y que, además, carece de cualquier tipo de sistema de freno", explica este neurólogo infantil.

A juicio de Febles, lo más importante es que se imponga el uso de protecciones. Cascos, coderas y rodilleras, "tres elementos baratos, que se venden en cualquier tienda deportiva, y que hubieran evitado la gravedad de los tres peores casos que hemos vivido en los dos últimos años".

Febles explica que los dos traumatismos craneales citados requirieron intervenciones quirúrgicas urgentes porque la situación en ambos casos era de riesgo vital. "Afortunadamente, todo salió bien y los dos superaron las lesiones sin secuelas. No ocurrió lo mismo en el caso del niño que sufrió la amputación parcial de la rodilla, una lesión que le dejará cojo durante toda la vida y, además, le obligará a someterse a nuevas operaciones en el futuro", detalla este profesional de la medicina.

El jefe de Servicio de Neurocirugía del Hospital Universitario de Canarias (HUC), Víctor García; el jefe de Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología del HUC, José Luis País, y el propio Febles se reunieron recientemente con el Diputado del Común para pedir que se implanten más medidas de seguridad y se exija el uso de casco y protecciones a los menores.

"No puede ser que cada año nos lleguen al hospital lesiones muy graves que se evitarían con el uso de unas simples protecciones. La tradición en esos municipios no se va a perder por llevarlas puestas", concluye Pablo Febles.

"A nadie se le ocurriría dejar a los menores subirse a un kart o a unos esquíes sin casco. Son medidas sencillas y lógicas que nos ayudarán a evitar que cualquier día se produzca una desgracia", advierte. La propuesta de estos médicos pasa por aprobar, mediante ordenanzas municipales en Icod, La Guancha y San Juan de la Rambla, el uso de este tipo de protecciones al subirse a las tablas en las Fiestas de San Andrés "al menos entre los menores".