¿Cómo vivió el alcalde de Santa Úrsula el complicadísimo domingo 23?

La situación fue muy complicada. Por lo que nos han transmitido los miembros de los equipos de seguridad y emergencias, nunca habían visto algo parecido. Ha sido una cosa espantosa. Ni los más expertos habían visto al fuego comportarse de una manera tan errática. Ves dos casas quemadas, tres o cuatro bien, y otras dos quemadas. Parecían bolas de fuego. Eso explica que las llamas empezaran en la zona alta, en Monroy y Ojitos terminara cruzando la autopista para llegar a La Quinta. La colaboración de toda la ciudadanía ha sido extraordinaria. Han colaborado con sus manos, con los medios que tenían para tratar de ayudar, y además siguieron a rajatabla las instrucciones que se dieron desde los equipos de emergencia. Sin la colaboración de todos, estaríamos lamentando víctimas. Y lo más importante es eso: no hay víctimas, aunque sí multitud de daños materiales.

¿Cuál es el balance oficial de daños en estos momentos?

No está terminado, pero por ahora sabemos que hay 30 viviendas afectadas total o parcialmente por el fuego, de las que hay que derribar de forma urgente al menos cinco. Esas viviendas con algún tipo de afección por el fuego están en Monroy (11), Tijarafe (3), Lomo Román (3), Paseo de Cala (4), Camino del Mar (2) y La Quinta (6). Se siguen evaluando los terrenos y cuartos de aperos dañados. Entre las 88 parcelas analizadas en Ojitos y Los Castaños hay más de 12 hectáreas afectadas, y aún queda por estudiar el impacto del fuego en 16 hectáreas más. Además, el Ayuntamiento se ha hecho cargo de 11 personas que o bien han perdido su casa o no pueden regresar a ella de momento.

¿Dónde están acogidas?

Las tenemos alojadas en unos apartamentos en Puerto de la Cruz mientras se resuelve su situación. Estarán ahí mientras busquemos soluciones.

¿Queda mucho por hacer?

Tenemos a una persona dedicada en exclusiva para recoger todos los datos de los daños sufridos por los vecinos afectados. Con todos esos datos, unidos a los que aportarán los técnicos municipales, haremos el informe final. Queremos tenerlo lo antes posible y, por eso, esa oficina especial funcionará de lunes a miércoles, de 8:00 a 14:00 y de 16:00 a 20:00 horas, para recapitular el máximo de información posible. Si queda alguna persona afectada que aún no se lo ha comunicado al ayuntamiento, que lo haga, porque esos datos los queremos llevar a un pleno extraordinario, a final de semana, para solicitar al Gobierno de Canarias que declare Santa Úrsula zona catastrófica.

¿Esa declaración hará que lleguen ayudas para los vecinos?

Para eso se hace. Esperamos que sí. Confiamos en la sensibilidad del Gobierno de Canarias y también del Cabildo de Tenerife.

¿Tienen el cálculo de cuántos vecinos han sufrido afecciones?

No, aún no, pero son muchos.

¿Cómo definiría la situación actual de los afectados?

Me he pasado por todas las casas y realmente lo que te encuentras es aún mucho nerviosismo. La gente se te agarra para contarte cuál es la situación en la que se quedan y en la mayoría de los casos son personas que han perdido sus casas, pero también su modo de vida. Vamos a tener una situación bastante complicada. Hablamos de familias que al lado de su casa tenían una parcela con cultivos y animales que formaban parte de su medio de subsistencia.

¿Murieron muchos animales a causa del fuego?

Hemos contabilizado más de una veintena.

La Guardia Civil

Sí, hemos visto que existe un comunicado oficial, pero la investigación no se ha cerrado y habrá que esperar. En estos casos, muchas veces el origen de todo está una imprudencia.

¿Aparte de esa posible imprudencia, se baraja alguna otra hipótesis respecto al fuego?

No. Pero el cóctel meteorológico era tan complicado, con vientos de más de 100 kilómetros por hora y más de 30 grados, que los testigos hablan de auténticas bolas de fuego. Como una película.

¿Santa Úrsula tenía medios para abordar algo así?

Yo creo que para afrontar algo como lo ocurrido, ningún municipio tiene los medios adecuados. Ni el más grande que te puedas imaginar. He visto que los bomberos han agradecido la colaboración ciudadana y me ha sorprendido. Me sorprende porque somos nosotros los que debemos estar agradecidos a todos los cuerpos de seguridad y emergencias. Todos trabajaron hasta la extenuación y se han comportado de una forma maravillosa. Y encima, son ellos los que le dan las gracias. Eso demuestra su calidad humana. Pese a todo, no faltaron efectivos y tuvimos una coordinación en todo momento con el Cabildo. Y la gente se ha portado de maravilla. El pueblo ha actuado como debía.

¿Cuál diría que fue el momento más crítico?

El momento más crítico fue cuando estábamos actuando en un fuego y nos empezaron a informar que ya había como seis focos activos en otras zonas. Se creó una situación muy complicada. Las llamadas eran incesantes. Ha sido muy fuerte.

¿Temieron por el edificio del ayuntamiento?

Temerse se temió por todo. Por donde pasaba ese fuego, todo estaba en peligro. Afortunadamente, todos los que participaron hicieron una labor extraordinaria e impidieron muchos más daños. Hablo de bomberos, UME, Brifor, Cruz Roja, Guardia Civil, Policía Nacional, la Policía Local de este y de otros municipios, el SUC, Protección Civil... todos trabajaron a una y en ningún momento nos dejaron desamparados.

¿Falló la coordinación?

Siempre en estos casos es complicado. Estamos actualizando el Plan Municipal de Emergencias y queremos tenerlo cuanto antes terminado. Pese a todo, la actuación que se hizo fue extraordinaria. Por mucho plan de seguridad, atender seis incendios a la vez, más el viento, es muy complicado. Empezó en la zona alta y cruzó la autopista hasta La Quinta. Fue algo impresionante.

¿Desalojar La Quinta fue lo más complicado?

Todo ha sido complejo, pero en ese momento se formó un caos circulatorio porque el fuego fue caprichoso. Ahí tengo que agradecer especialmente la colaboración del alcalde y del pueblo de La Victoria de Acentejo. Tuvieron un comportamiento ejemplar que nos permitió sacar a la gente de aquí, porque el aire ya era irrespirable entre el humo y la calima.

¿Y qué pensó entonces del Ayuntamiento de Santa Cruz?

En ese momento no tenía ni tiempo de pensar en carnaval ni en nada. Sólo quería salir de esa situación. A toro pasado, realmente piensas que ante una situación de este tipo, con una alerta, todos los medios deberían de estar a disposición de este tipo de riesgos. Nosotros hemos cancelado todos los actos de este mes para centrarnos en lo prioritario. Hay que estar en lo que tenemos que estar.

¿El abastecimiento de agua se ha recuperado?

Sí, contratamos a 12 fontaneros que estuvieron 24 horas trabajando y lograron restablecer el servicio. Poco a poco ha mejorado, pero es fundamental que la gente limite el gasto de agua y se olvide por ahora de los jardines y de los coches. Eso ahora es secundario. El gasto de agua ha sido impresionante. Debemos ser solidarios otra vez o, de lo contrario, la policía tendrá que actuar porque la situación es aún complicada.