La Isla todavía no se ha recuperado por completo del temporal de viento y calima que azotó el pasado fin de semana el Archipiélago. Las fuertes rachas que soplaron con intensidad en muchos puntos de Tenerife han ocasionado una gran cantidad de daños que todavía no han podido ser solventados a pesar de los días transcurridos. Este ha sido el caso de las diferentes áreas recreativas y zonas de acampada que hay repartidas por la Isla, que permanecerán cerradas al menos hasta el lunes, debido a que las incidencias causadas tanto en su mobiliario como en la vegetación de la zona pueden llegar a suponer un peligro para los visitantes.

Ante esta circunstancia, la consejera del Área de Gestión del Medio Natural y Seguridad del Cabildo de Tenerife, Isabel García, firmó en la mañana de ayer una resolución a través de la que informa del cierre hasta el lunes 2 de marzo de todas las zonas recreativas y áreas de acampada de la Isla. El motivo es principalmente los "daños en sus infraestructuras, así como en las vías de acceso y en el arbolado colindante".

Dado el poco tiempo transcurrido y las numerosas incidencias que hay por toda la Isla, el personal del área de Medio Ambiente y Seguridad todavía no ha podido certificar la seguridad de todas estas zonas de esparcimiento, por lo que el Cabildo ha decidido que permanezcan cerradas hasta que se verifique que los daños causados no suponen ningún riesgo para los usuarios.

"Se trata de una medida preventiva, y como siempre basada en la seguridad de las personas", indicó la consejera responsable, ya que "los efectos del viento del pasado fin de semana han causado daños en árboles, palmeras e incluso en el mobiliario de parques y zonas recreativas". De esta manera, manifestó que "hasta que no podamos asegurar que no existe peligro en ellas, no autorizaremos su apertura".

Los equipos de Medio Ambiente del Cabildo tinerfeño han trabajado intensamente durante los últimos días para eliminar cualquier posible situación de riesgo en los espacios naturales de la Isla y continuarán trabajando en los próximos días "hasta que no exista ningún posible peligro".

De esta manera, casi la totalidad de la veintena de áreas recreativas que hay en los espacios naturales de la Isla y que son gestionadas por el Cabildo insular se verán afectadas por la decisión de que permanezcan cerradas durante este fin de semana. Solo dos, que ya han sido revisadas por los técnicos que se han asegurado que no existe peligro, estarán abiertas tanto hoy como mañana y el domingo. Se trata del área de Los Pedregales, ubicada en la zona de El Palmar, en Buenavista del Norte, así como la zona de Llano de Los Viejos, localizada en Las Mercedes, en el municipio de San Cristóbal de La Laguna.

Por lo tanto, permanecerán cerradas a los visitantes Arenas Negras, en Garachico; Chanajiga, en Los Realejos; Chío, en Guía de Isora; El Contador, en Arico; o El Lagar y Las Hayas, en Icod de los Vinos. También estará prohibido acceder a las áreas recreativas de Hoya del Abade, en La Victoria; La Caldera y Ramón El Caminero en el municipio de La Orotava; La Laguneta Chica, en Santa Úrsula; La Tahona, en San Juan de la Rambla; al espacio de Las Calderetas, de El Sauzal; en Adeje también estará cerrada el área de Las Lajas; así como Las Raíces, en El Rosario. Además, están afectadas por el cierre Lomo La Jara, en Tacoronte; Los Frailes en Arafo; y San José de Los Llanos, ubicada en el municipio de El Tanque.

La Quebrada en Tegueste también permanecerá cerrada, ya que además de los daños que haya podido sufrir se encuentra clausurada por obras hasta el mes de abril.

El temporal dejó rachas de viento que superaron los 80 kilómetros por hora el pasado sábado y los 100 kilómetros por hora el domingo, según los datos registrados por la Agencia Estatal de Meteorología en Canarias. Un fenómeno que vino acompañado además por altas temperaturas y calima.

Incendios

Además, el temporal de viento y calima dejó el pasado domingo sobre todo en el Norte de la Isla una sucesión de incendios que pusieron a prueba a los efectivos de seguridad y emergencias, que en un corto periodo de tiempo tuvieron que actuar para acabar con varios fuegos que se originaron en diferentes municipios. La Orotava, Santa Úrsula, Los Realejos y La Guancha fueron las localidades en las que se produjeron este tipo de incidentes, que en el caso de algunos de ellos obligaron a desalojar a numerosas personas de sus viviendas debido a las proximidad de las llamas.

Precisamente, en la mañana de ayer el Centro de Coordinación de la Operativa Insular (Cecopin) informó de que se daba por extinguido uno de los focos que se originó el pasado domingo en el municipio de La Guancha, cuando las brigadas forestales del Cabildo (Brifor) concluyeron las labores de refresco. En esta zona ardieron unos 700 metros cuadrados de pinos, eucaliptos y granadillo.

El Cabildo tinerfeño ya había informado el pasado miércoles de que todos los focos de incendios provocados por el temporal continuaban controlados, y recordó que muchos de ellos se daban ya por extinguidos. Asimismo, incidió en que los medios que trabajan en las diferentes zonas seguían realizando trabajos de refresco y vigilancia.