El Ayuntamiento de La Orotava gestiona la compra de una parcela de una hectárea de superficie, ubicada en la zona alta del polígono comercial e industrial de San Jerónimo, en pleno corazón del Valle de La Orotava, para posteriormente cederla al colectivo del Refugio Internacional de Animales para que construya por fin el anhelado y necesario albergue comarcal de perros y gatos abandonados.

El alcalde villero, Francisco Linares (CC), asegura que el presupuesto de 2020 tiene una partida de unos 100.000 euros con la que se pretende adquirir el terreno necesario para acabar con una carencia histórica. "Una vez cedida, esperamos que se haga pronto realidad con fondos de ese colectivo y con la ayuda del Cabildo de Tenerife", señala.

Linares destaca que "el Ayuntamiento de La Orotava es el único que no solamente habla, sino que tiene una partida en su presupuesto para adquirir la parcela del refugio".

Respecto a su carácter municipal o comarcal, Linares señala que "si quieren darle carácter comarcal, que ayuden a mantenerlo entre todos. Nosotros ya hemos dado el paso. Tenemos contactos con el resto de ayuntamientos, pero ahora falta que eso se plasme económicamente. Esto no es cuestión sólo de buenas intenciones. En los presupuestos municipales de los ayuntamientos de la comarca debe aparecer una partida que diga: refugio comarcal de animales".

El alcalde de Los Realejos, Manuel Domínguez (PP), declaró recientemente a EL DÍA que ese refugio comarcal de animales en el Valle de La Orotava era una necesidad evidente: "Hace falta ese servicio y el actual gobierno del Cabildo de Tenerife sigue en la misma línea que el anterior, sin dar respuesta un problema que necesita una solución que sí se le ha dado en otras partes de la Isla de Tenerife, como el Sur o el área metropolitana".

El 12 de junio de 2014 se celebró la última junta de la Mancomunidad del Valle de La Orotava, integrada por los ayuntamientos de Los Realejos, La Orotava y Puerto de la Cruz, en la que se acordó la liquidación de una entidad que tenía entre sus proyectos más inmediatos la puesta en marcha de este refugio comarcal.

En aquella reunión de 2014, se planteó la posibilidad de crear "una nueva figura jurídica como la de un consorcio, que permitirá la adaptación normativa y la efectividad de proyectos comunes, dando posibilidad de integración a otras administraciones como Estado, Gobierno de Canarias o Cabildo de Tenerife, así como a entidades empresariales de la isla". Una iniciativa que nunca llegó a concretarse.

La Mancomunidad del Valle de La Orotava, la primera de las creadas en Tenerife, fue constituida en el año 1967 por los ayuntamientos de La Orotava, Puerto de la Cruz y Los Realejos. Con posterioridad se adhirió Santa Úrsula. En principio sólo se mancomunaron los servicios de Bomberos y la Casa de Socorro, que luego fueron asumidos por el Cabildo de Tenerife y el Servicio Canario de Salud (SCS), respectivamente. Aunque sus competencias eran mucho más amplias, este traspaso arrastró a la entidad a un periodo de crisis e inactividad. El Ayuntamiento de Los Realejos la abandonó en 1984 al considerar que estaba "vacía de contenidos" y "desfasada", aunque se reincorporó de nuevo en 2001.

En 2012 se reactivó con la intención de desarrollar proyectos comunes como el servicio de transporte público de guaguas; el citado refugio de animales; la recogida selectiva de residuos sólidos y reciclaje; la depuración y saneamiento de las aguas, o la limpieza viaria. Proyectos que se descartaron definitivamente con su liquidación apenas dos años después.