El gobierno municipal de Granadilla de Abona rechazó ayer las reclamaciones presentadas por el PSOE al Presupuesto del Ayuntamiento para este año, a pesar de que las mismas contaban con el informe favorable de la Intervención del Consistorio. Los tres grupos políticos de la oposición votaron en bloque a favor de tales alegaciones.

Jennifer Miranda, la portavoz del Grupo Municipal Socialista, argumentó que se presupuesta un gasto en Personal superior a lo determinado por los Presupuestos Generales del Estado, "generándose el riesgo de que tengan que devolver lo que pagarán de más a los trabajadores"; porque el Plan de Inversión incumple el Plan de Haciendas Locales y "es ficticio", atendiendo a los antecedentes, ya que "durante los años anteriores no ejecutaron ni el 20% del mismo"; siendo el tercer motivo de legalidad que "arbitran mecanismos para adjudicar a dedo todos los contratos por importe inferior a 10.000 euros, sin pedir las tres ofertas preceptivas".

Como motivo "político" de impugnación del Presupuesto, Miranda insistió en que "se triplica la partida de fiestas respecto a lo que destinó el PSOE en sus gobiernos", pasando de unos 300.000 euros a casi un millón, y sube el importe destinado a propaganda y publicidad de 150.000 euros en 2017 a medio millón en este ejercicio, "algo esperpéntico".

El gobierno municipal (CC-PP) entiende que su Presupuesto para 2020 se ajusta a la legalidad, por lo que hoy entra en vigor.