¿Qué balance hace de estos primeros meses de mandato?

Entramos el 15 de junio, pero realmente todo el gobierno y la distribución de áreas se hizo con tranquilidad y haciendo mucho análisis. Nos preocupamos porque hubiera un documento de pacto de verdad y no sólo un reparto de poder con Asamblea Ciudadana Portuense (ACP). Después de todo ese proceso, nos dimos un plazo para conocer a todos los jefes de área, a los técnicos y la distribución del ayuntamiento. Eso nos permitió organizar un ayuntamiento acorde a la realidad y a lo que el Puerto de la Cruz necesita, no a conveniencia del gobierno. El balance de estos primeros meses tiene sobre todo que ver con los resultados obtenidos por el equipo. Cada día estoy más contento con la formación de este gobierno, con mis compañeros de partido y con los compañeros del otro partido. Formamos un único gobierno y eso es muy positivo después de un mandato anterior en el que había un gobierno bastante desestructurado, entre las partes y también dentro de algunas de esas partes. Esto nos ha permitido centrarnos en la gestión municipal y hacer un balance bastante positivo. A día de hoy no hay ni un solo concejal de este gobierno que no esté cubriendo con creces mis expectativas y supongo que las expectativas de los vecinos.

¿Y respecto a la gestión?

Pues estamos muy orgullosos de haber podido culminar muchos expedientes, ya que aunque algunos vienen del gobierno anterior (PP-CC) no se ultimaban y nos ha tocado a nosotros sacarlos adelante. La paz social con los trabajadores municipales también nos ha ayudado a ser algo más eficientes y mejorar los resultados. En este periodo de tiempo, lo más positivo es seguir avanzando con cuestiones como la firma de la licencia de la obra de reforma del hotel Taoro, la semana pasada, que es una buena noticia para la ciudad. Licitaciones que no salían; cuestiones judiciales de muchos años, como la obra de El Durazno, que hemos logrado resolver, o asuntos pendientes como el estudio de carga de la plaza de Europa o el estudio sobre el alcantarillado. Y eso habla bien de esta institución. Además, avanzamos en cuanto a la mejora de la imagen de Puerto de la Cruz.

¿Considera que ya han ayudado a cambiar la imagen de la ciudad?

La imagen de la ciudad ha mejorado con un gobierno más unido. Se proyecta una imagen sólida de Puerto de la Cruz, que, a su vez, es una imagen atractiva para la inversión. Está el Taoro, pero también hemos conocido recientemente la compra del hotel Los Príncipes, en la plaza Viera y Clavijo, que llevaba años cerrado, o los contactos mantenidos en Fitur para la futura renovación del hotel San Telmo. Todo eso unido a la coordinación y la transversalidad de las áreas; la elaboración de diagnósticos en el ámbito comercial, turístico o deportivo, y la puesta en valor de esos elementos que hacen de Puerto de la Cruz una ciudad única y que nosotros llamamos identidad portuense. Eso que la oposición parece no entender muy bien.

¿Satisfecho con el inicio de las obras del hotel Taoro?

Sí, se ha trabajado en los últimos meses de forma continua. La administración ha sido la administración amiga que hace falta para una inversión de estas características por su importancia en la generación de empleo y riqueza, pero sobre todo por lo que la apertura de este hotel significa para esta ciudad. En este tiempo hemos compartido con los promotores de esta iniciativa nuestro modelo de ciudad y ellos han dejado claro que no vienen sólo a gestionar un hotel, sino para formar parte de Puerto de la Cruz. Las obras están divididas por fases y ha comenzado la limpieza y la retirada de escombros. Ya es una realidad. En poco tiempo se presentará públicamente el proyecto y su previsión es que puedan abrir a finales de 2021 o principios de 2022.

¿Se inaugurará el nuevo hotel Taoro en este mandato?

Sí, estoy convencido.

¿Y el Parque San Francisco?

Sigue cumpliendo plazos y está en proceso. Seguimos trabajando y a la espera de que acabe el desmontaje para que empiece la siguiente fase, que será compleja porque habrá un arqueólogo a pie de obra. Sabemos que ahí existía un convento y que esa zona también albergó una cárcel. No hace tanto pasamos una guerra civil y habrá que comprobar que es lo que encontramos ahí durante la construcción de los pilares.

¿La obra del nuevo y esperado auditorio está garantizada?

Sí, el proyecto está y la partida presupuestaria también, lo único que falta es concretar el equipamiento final. Algo que llevamos meses negociando la participación de otras administraciones, como el Gobierno de Canarias, que entiendan que esta ciudad debe ser la llave cultural del Norte.

¿Podría construirse también en este mandato?

Estoy convencido de que veremos el inmueble en construcción, aunque soy consciente de que podemos encontrar sorpresas cuando comiencen los trabajos. Tendremos un auditorio para que podamos contar, después de muchísimo tiempo, con una agenda cultural estable y constante.

¿Cuándo prevé que comience la obra de la piscina?

Pues cuando concluya el proceso administrativo. No le puedo poner plazos concretos, pero hay mucho interés en que esa obra empiece lo antes posible y esperamos ver movimientos allí ya durante el próximo verano. Hay cuatro empresas que optan y también confiamos en que la adjudicataria mejore los plazos. Eso no quita que sigamos trabajando en el convenio de gestión, que es el que no existe, ya que los anteriores gobiernos solo dejaron un convenio de construcción y nosotros queremos dejar claro cómo se gestionará ese Centro Insular de Natación.

¿Tiene la esperanza de que se construya antes de que finalice su primer mandato?

Más que una esperanza creo que será una realidad. Esperamos noticias muy positivas para esta ciudad en los próximos años.

¿Habrá alguna noticia positiva de la playa de Martiánez?

Por primera vez hubo un contacto entre el Estado, el Cabildo y el Ayuntamiento de Puerto de la Cruz. Lo que podemos decir a fecha de hoy es que tanto el consistorio como el Cabildo hemos aprobado los convenios necesarios. Nos hemos encontrado procedimientos administrativos que no se pueden prorrogar, que se dejaron caducar por gobiernos anteriores, y ahora el Estado busca fórmulas para actualizar eso.

¿Se desbloqueará esa obra?

Confío en eso, pero no quiero generar falsas esperanzas. El trabajo en el ámbito insular y municipal ya se ha hecho y ahora estamos pendientes de procedimientos administrativos del Estado. No nos vamos a quedar con los brazos cruzados a esperar, como hicieron otros. Esa obra tenía presupuesto hace 8 años, pero trataremos de desbloquearla con gestiones y contactos directos con la propia ministra a través de los diputados canarios Tamara Raya y Héctor Gómez. Eso nos puede ayudar, pero no quiere decir que no tengamos que cumplir procedimientos administrativos que son obligados.

¿Le sigue quitando el sueño la interminable ampliación del Jardín Botánico?

Sí, pero al menos ahora tenemos una partida del Gobierno de Canarias para esa ampliación. Estamos a la espera de hacer una visita conjunta con las consejeras regionales de Agricultura y Turismo. Lo sorprendente y lo que vamos a comprobar y compartir in situ es que después de tantos años y de tantas fechas la realidad es que esa partida será para redactar el proyecto para concluir la ampliación. Porque aunque cueste creerlo, allí no hay ni un solo árbol plantado. Será una realidad dura para la ciudad, pero la expondremos públicamente porque existe un compromiso real y tenemos partidas económicas para la ampliación y el equipamiento de ese centro de visitantes. De nuevo hemos dado pasos que no se habían dado nunca. El trabajo en equipo con otras administraciones está dando sus frutos.

¿Cuándo espera abrir al menos una parte?

No lo sé, a lo que me voy a comprometer es a que la gente conozca la realidad. Se ha producido un silencio, pero nosotros vamos a ser transparentes. Mi objetivo del mandato no es cortar cintas, sino mostrar verdades y avanzar.

¿Algún avance respecto a la gran reforma de la TF-312?

Este miércoles nos reunimos en el Cabildo para poner verdades sobre la mesa y seguir dando pasos para que el trabajo técnico y político avance. Hay buena coordinación y seguimos aclarando cosas. En el Cabildo hay mucha voluntad política para que ese convenio vea la luz. El documento ya está redactado y tiene el visto bueno de las dos administraciones y sólo está a la espera de los informes jurídicos y de su aprobación definitiva. En un mes es posible que tengamos firmados y aprobados todos los convenios para seguir, posteriormente, con la planificación de esa obra que tendrá que ejecutarse por fases. Seguimos trabajando junto a las jefas de área y el edil de Ciudad Sostenible, David Hernández (ACP), para sacarlo adelante.

El PP les acusa de no creer en el proyecto del muelle...

Lo curioso es que nos acuse un partido que incumplió la hoja de ruta pactada y que fue incapaz, incluso, de convocar las mesas de seguimiento acordadas. No se respetaron los acuerdos. Ahora no le corresponde al ámbito local seguir avanzando, depende de otras administraciones. No hay cambios de posición, sólo una realidad: CC y PP permitieron, a través de la Ley del Suelo, rebajar la categoría de nuestro muelle. Yo sólo trabajaré para que se continúe con un proyecto que recupere la categoría anterior. Tengo claro que no quiero para esta ciudad ningún muelle sin transporte de pasajeros. No lo creo yo ni mi gobierno.

¿Pelearán por un muelle con transporte de pasajeros?

Por supuesto, es el objetivo número uno. Y eso tiene una vía: un cambio legislativo con la implicación de otras administraciones.

¿Su gobierno confunde lo secundario con lo prioritario, tal y como asegura el PP?

Lo que le pasa a esta oposición es que no da crédito a la capacidad de un gobierno que no tienen que dejar unas cosas para hacer otras. Eso es lo que le pasaba al PP, que ha gobernado esta ciudad durante diez años. Quizás ellos tenían la necesidad de dejar algunas cosas para asumir otras. Yo tengo fe en mí y en mi equipo de trabajo. Cuando uno asume el liderazgo de un gobierno hay que tener plena confianza. Un municipio no lo pueden gestionar dos personas ni funcionar como reinos de taifas. Antes cada uno defendía su parcela, pero ahora David Hernández, como responsable del área de Urbanismo, puede hacer su trabajo mientras Carolina Rodríguez (PSOE), desde el ámbito de Hacienda y Turismo abre nuevos caminos como el proyecto de Mujeres Urbanitas. Se puede trabajar desde la transversalidad cuestiones que colocarán a la ciudad en lo que fue siempre: una ciudad pionera y de vanguardia.

¿El Valle necesita un refugio comarcal de animales?

Tengo plena confianza en el concejal específico, Alberto Castilla (PSOE), que no ha parado de trabajar para encontrar una solución. Es un problema de la comarca, pero especialmente de esta ciudad, ya que es donde más animales se abandonan porque la gente sabe que los vamos a atender. Tengo que agradecer enormemente el trabajo de las tres asociaciones protectoras que trabajan aquí para atender a perros y gatos. Creo que también hay una situación de cierta complejidad porque las administraciones no les hemos dado una cobertura. Estamos ante un problema comarcal y, de nuevo, vamos dando pasos en el Valle que no se habían dado. Hemos propuesto un pacto por la protección animal en el ámbito municipal, que regule la situación de las protectoras para que puedan estar amparadas por la administración por la gran labor que hacen. Y a partir de ahí, seguir caminando juntos.

¿Cuál es la situación actual del refugio de La Rosaleda?

Nosotros tuvimos una mesa respecto a la situación de todas las protectoras y la realidad es que todas tienen sus complicaciones y su complejidad. Se trata de un trabajo puramente voluntario y el ayuntamiento carece de espacios, recursos y personal para dar cobertura a esta necesidad. También existe una cierta exigencia social ante este trabajo voluntario que tampoco es buena para nadie. Encima que hay un trabajo voluntario y desinteresado, en algunos casos se usan las redes sociales para ponerlo en duda. No es una prestación de servicios, no son empresas, en todo caso son entidades sin ánimo de lucro formadas por personas que dedican su tiempo a la protección animal. Tienen todo mi amparo. La intención es ir paliando en la medida de lo posible su situación.

¿Están en una situación de legalidad?

Nos queda darle muchísimo más amparo. Las cuestiones legislativas han cambiado y lo que antes se podía considerar normal, ahora no lo es, y eso ocurre en todos los ámbitos. Por eso estamos impulsando un trabajo importante en ese aspecto.