Además de los 442 millones de euros invertidos hasta la actualidad en la obra realizada, terminar los trabajos contemplados en mar y tierra para completar el puerto de Granadilla requiere de 290 millones de inversión, de los que 130 millones se emplearán en la obra estrictamente portuaria y otros 160 millones en las actuaciones a desarrollar en tierra. La inversión tiene carácter plurianual presupuestando 21,5 para el ejercicio en curso, otros 29,5 millones en el año 2021, se suman 37 millones de euros en la anualidad de 2022 y se contemplan 22 millones para 2023, concluyendo con 109 millones de euros en el año 2024, además de las cuantías que se destinan a las expropiaciones del suelo que se requiere.

El presidente de la Autoridad Portuaria se muestra optimista respecto al futuro de estas obras. Asegura que el puerto "funciona en la medida que puede hacerlo", explica que Puertos de Tenerife licita actualmente el edificio administrativo y el Centro de Inspección Portuaria, anunciando que "a finales de este año convocaremos la licitación de una línea de 500 metros de longitud que resta por hacer del muelle de ribera, así como el relleno trasero de la misma para construir la explanada del muelle".

Carlos González atribuye el retraso que experimenta la construcción de esta infraestructura a la necesidad de disponer autofinanciación para hacerlo. "Lo que se destina este año a inversiones en el puerto de Granadilla es lo que se obtuvo en el de Santa Cruz durante 2019, no es un dinero que procede del exterior, es lo que genera la Autoridad portuaria", enfatiza el presidente del ente, explicando que es lo establecido.

La reformulación de la gasificación de Canarias planteada por la empresa Enagás ante el Ministerio de Transición Ecológica es un motivo de preocupación para la Autoridad Portuaria. Su presidente manifiesta que "hay reservada una parcela importante destinada a ese fin que hoy está en desuso". González espera que el Gobierno central haga pública su propuesta sobre el gas para las Islas para que "quede definido el futuro de ese suelo".

"Difícil" es el término que utiliza al pronunciarse sobre la posibilidad de establecer un uso mixto -industrial y para el tráfico interinsular- del puerto granadillero. Lo argumenta estimando que con esa medida "se incrementan el tiempo y los costes por trayecto", calculando que se duplicaría el tiempo que se emplea actualmente para recorrer la ruta San Sebastián de La Gomera-Los Cristianos. "Eso lo encarece todo".

El 2 de marzo de 2018 fue cuando el entonces presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, inauguró el puerto de Granadilla. "Bueno, se inauguró una defensa de la dársena, quedaba mucho por hacer", puntualiza el titular de Puertos de Tenerife. Admite que ese hecho pudo contribuir a espolear la mala prensa que esta infraestructura tiene en una parte de la sociedad tinerfeña, "porque una inauguración suena a que todo está hecho y que la actividad puede empezar al día siguiente". Este no es el caso.

Hasta el punto que "estamos esperando a que Puertos del Estado apruebe los pliegos para los servicios de práctico y remolcador". En la actualidad, las prestaciones de ambos servicios de las que se beneficia el recinto portuario de Granadilla "son las que se utilizan en Santa Cruz de Tenerife, a 60 kilómetros de distancia, lo que conlleva de incremento del coste".

Escuchando al presidente de la Autoridad Portuaria cabe concluir que el desarrollo de la materialización del proyecto del puerto de Granadilla "está en pañales". Al tiempo, Carlos González apostilla que "en breve se le dará un salto importante".

En consonancia con lo anunciado el lunes pasado por el presidente de Puertos del Estado, Salvador de la Encina, en su visita oficial a la Isla, González espera que "en 2023 estará operativo lo que es estrictamente el puerto de Granadilla", pero la Autoridad Portuaria también tendrá que realizar, con financiación europea, la conexión viaria directa del recinto portuario con la autopista TF-1.

Los Cristianos

En la comarca Sur, el Estado también gestiona el puerto de Los Cristianos (Arona), nudo de la comunicación marítima interinsular en la provincia Occidental. Reconoce que el colapso es tal que vivió la experiencia de muchos usuarios habituales de este recinto: tardar más entre el puerto y la autopista que en el viaje desde San Sebastián de La Gomera. "Pero esto no tiene solución desde la perspectiva de la Autoridad Portuaria", ya que esa situación la genera el tráfico de vehículos transportados en barco "que choca con el tráfico importante que soporta la ciudad de Los Cristianos más el que le genera a la propia autopista". Admite que Puertos "puede tomar medidas para parchear, para que la situación no sea tan dramática, pero no tenemos una solución para eso, salvo que la actividad portuaria se realice en otro sitio", manifiesta González.

El recinto del puerto de Los Cristianos "se va a manter tal cual", con algunas actuaciones puntuales, como la prevista de aumentar la zona de preembarque de vehículos. "Serán pequeñas cosas para facilitar un poco las operaciones, pero no es la solución al problema", apostilla.

El puerto del Sur no es, hoy por hoy, un punto reclamado por las compañías de cruceros, que sí realizan fondeos, "pero muy pocos". Las cifras de este segmento turístico sí son espectaculares en el puerto de Santa Cruz de Tenerife, donde "queremos mantener la línea del año pasado, que registró la afluencia de unos 650.000 cruceristas del más del un millón registrado en los puertos de nuestra competencia, que incluyen 250.000 cruceristas en La Palma -donde tenemos pensado ampliar el puerto en una línea de 150 metros para cruceros de más envergadura- y unos 80.000 en La Gomera", indica Carlos González.