El grupo de Sí Podemos Canarias en el Cabildo de Tenerife denunció ayer las condiciones laborales de una parte de la plantilla del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables de Tenerife (ITER). Su portavoz, María José Belda, aseguró que muchos trabajadores se encuentran "desde hace varios años en una situación de absoluta precariedad e inestabilidad laboral, en la que más de la mitad de la plantilla sufre una situación de alta temporalidad en sus contratos desde hace años".

Por eso, el grupo solicitó la comparecencia del director-gerente de la entidad, Manuel Cendagorta, que finalmente realizó recientemente en la Comisión Plenaria de la Corporación, en la que expuso la gestión de los Recursos Humanos de la empresa en materia de contratación, seguridad, salud en el trabajo y asignación de personal a los proyectos. Asimismo, también confirmó la existencia de denuncias por casos de acoso laboral dentro de la entidad. Cendagorta aseguró que este hecho fue denunciado hace seis meses y ha manifestado que la empresa contrató a una persona externa para hacerse cargo de esta situación. En estos momentos, el caso se encuentra en fase de análisis y se espera que pronto se reciba un informe con las conclusiones pertinentes, que servirá para la toma de decisión por parte del ITER.

Por su parte, el consejero responsable del ITER, Enrique Arriaga, informó durante la comparecencia que el grupo de gobierno, una vez comenzó a realizar la auditoría laboral sobre el ITER, se encontró con una "situación que no es agradable" en la que esta entidad, formada por una agrupación de muchas empresas, había tenido un "crecimiento desmesurado" y, como causa de ello, la organización del personal también había crecido "de forma no lo suficientemente ordenada". Arriaga informó que "ese crecimiento provocó que hubiera plantilla del ITER en empresas como Involcan o Canalink, generando una serie de situaciones que no son las deseadas y esto, al fin y al cabo, lleva a una precariedad en el empleo que, evidentemente, se tiene que solventar".