La Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del Instituto de Arico vuelve a protestar porque el servicio de transporte escolar se ve obligado a realizar un recorrido mayor, a la salida de los alumnos del centro, para impedir que la guagua incurra en una infracción de tráfico al cruzar una línea continua en su incorporación a la carretera general del Sur. De ello culpan a un incumplimiento del Cabildo.

La situación ya generó un conflicto el pasado octubre que, tras la polémica, se resolvió el día 30 de ese mes con la entrada en vigor del acuerdo alcanzado por el Cabildo, la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias y el Ayuntamiento, entonces presidido por la socialista Olivia Delgado. La solución consistió en que personal del área insular de Carreteras regularía el tráfico a la entrada y salida del alumnado, de manera que se diera mayor fluidez al tránsito en la zona.

El compromiso hecho público señalaba que el servicio se prestaría hasta contar con un convenio con la Dirección General de Tráfico (DGT), para que habilite al personal de seguridad o protección civil municipal que regule el acceso de la guagua escolar a la TF-28 en sentido Sur. Asimismo, anunciaba la construcción de una rotonda "que ya cuenta con proyecto y que tardará entre seis y ocho meses en ejecutarse".

El vicepresidente y consejero del Área de Carreteras, Movilidad e Innovación del Cabildo, Enrique Arriaga, y la alcaldesa, Olivia Delgado, dieron a conocer el acuerdo que cesó el último lectivo del año 2019, "porque desde que se reanudaron las clases no hemos tenido ese servicio ni un solo día", señalan desde el AMPA.