Este año no abrió el calendario de romerías en la Isla -sí en la comarca-, pero el casco urbano de Arona congregó ayer a varios miles de vecinos y turistas (según la versión oficial) que acudieron a participar, los primeros, y a presenciar, los otros, el acto más popular de la fiesta local en honor a San Antonio Abad, su patrón: la romería.

"Los datos de este año, con miles de participantes, más de 800 turistas transportados al Casco por la corporación y más de 200 mayores de los diferentes centros, indican que se ha trabajado en una estrategia correcta", señala el alcalde, José Julián Mena.

Más de cuatro siglos contemplan a esta tradición en Arona. "La devoción hacia San Antonio Abad se encuentra fuertemente arraigada entre los aroneros y es una celebración en la que nuestro municipio hunde sus raíces cuatro siglos atrás", decía el regidor, quien realzó la implicación vecinal en la recuperación de la fiesta.

Como cada año, a las 10:00 horas comenzó la jornada con la apertura de la Muestra de Artesanía en la plaza del Santísimo Cristo de la Salud, dando paso a la misa principal (de 11:00 a 12:00 horas), cantada por la Parranda Chasnera en la parroquia de San Antonio Abad. A su término, con la presencia de la danza de los tocadores y bailarines de El Hierro, comenzó la romería, con las actuaciones de grupos folclóricos municipales e invitados.

Y se cumplió con uno de los momentos centrales de la fiesta: la bendición de los animales (cabras, perros, caballos, ovejas...) mientras los romeros comenzaron a recorrer las calles El Calvario, Domínguez Alfonso, La Luna y Duque de la Torre.

La tarde de este domingo está amenizada en Arona por un gran baile protagonizado por las orquestas Wamampy y Los Teymar. Es en la plaza del Santísimo Cristo de la Salud hasta las diez y media de la noche.