El gerente de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Islas Canarias, Raúl Román, recuerda que la Consejería de Agricultura del Gobierno de Canarias calcula que en todo el Archipiélago se han perdido en los últimos cuatro años "en torno a 2.000 hectáreas de viñedos", una reducción que achaca a la escasa rentabilidad, la falta de ayudas y de relevo generacional, y la pujanza de otros "cultivos de moda", como el aguacate o el olivo. A su juicio, la única manera de frenar esta progresiva pérdida de viñedos es fijarse en otros territorios europeos ultraperiféricos como Madeira, en Portugal, "donde existe un sistema de ayudas que ha evitado que se pierda superficie de cultivo y ha logrado que, incluso, aumente un poco".