"Esta romería es muy cercana, pequeña, pero auténtica". Con estas palabras define Rayco Quintero el paseo romero en honor a San Antonio Abad que este domingo 12 de enero se celebró en el núcleo realejero de Tigaiga, sin dejar de atender a las decenas de personas que se acercaban hasta su carreta para reclamar un vaso de vino o un trozo de carne. La suya era una de las cinco que formaron parte del recorrido. "Normalmente hay unas diez, pero este año la gente no se ha animado", lamentó.

Sin embargo, la menor afluencia de gente no fue impedimento para que quienes se decidieron a acudir a Tigaiga disfrutaran al máximo de esta romería que presume de ser la primera del año. "Estamos muy orgullosos de abrir el calendario", aseguró Quintero. Este año además, no hay duda, ya que aunque habitualmente esta celebración coincide con la que también tiene lugar en Arona, en esta ocasión el municipio del sur de la Isla acogerá su romería el próximo domingo 19.

Entre las características de este festejo se encuentra también la disposición de la comisión de fiestas "que pone todo lo necesario para que todo el mundo, vecinos y visitantes, puedan comer y beber". De esta manera, se ha convertido en una romería que atrae a muchos extranjeros que acuden a vivir la fiesta en primera persona. "Lo importante es pasarlo lo mejor posible y los que tengan que cortarse porque el lunes hay que trabajar, que hagan como yo que me pedí el día de asuntos propios", bromeó Quintero.

El festejo comenzó sobre la 13:00 de la tarde, cuando dio inicio la eucaristía en la ermita de Nuestra Señora de la Concepción de Tigaiga. Una misa que fue cantada por la Agrupación Folclórica Los Trigales.

Mientras unos asistían a la ceremonia, otros preparaban en las carretas todo lo necesario para el paseo romero. Gofio, papas, pan con chorizo, huevos y por supuesto el buen vino, no pudieron faltar en ninguna de ellas. Juan Díaz era uno de los muchos que ayer participó en una de estas carretas y se declaró enamorado de la romería de Tigaiga a la que lleva asistiendo muchos años. "Soy de La Orotava y esta romería me gusta más que la nuestra", reconoció.

Para él "aquí no te exigen nada, cada uno viene como quiere y no te gastas ni un euro si no quieres", explica. Díaz aseguró vivir intensamente esta fiesta porque es "la primera del año", además de que está "libre de aglomeraciones" ya que "solo viene la cantidad de gente perfecta". Aunque reconoce que en esta edición "parece que va a haber una asistencia menor", él pensaba pasárselo igualmente bien. Por eso, este orotavense se preparaba para pasar allí todo el día y quedarse "hasta que el cuerpo aguante".

Díaz quiso agradecer a la comisión de fiestas todos los productos que les habían entregado para repartir durante el paseo romero haciendo que ellos solo tuvieran que poner "algunas cosas más" y encargarse de engalanar la carreta.

José Francisco Expósito también esperaba junto a su carreta a que se iniciase el paseo romero. En el carro, ya preparado, el brasero encendido comenzaba a desprender un olor característico de la fiesta. "Ofreceremos el menú habitual en estos festejos, carne, pan, huevos y gofio y por supuesto no puede faltar el vino", indicó.

"Aquí casi todos somos familia, por eso esta romería es tan especial", señala Expósito, que estaba impaciente por que comenzara por fin la fiesta en honor a San Antonio Abad.

Poco antes de las 14:00 de la tarde finalizó la misa cantada y comenzó uno de los momentos más emotivos del día. La imagen del santo abandonó la ermita y cargada a hombros comenzó la primera parte del recorrido. Poco a poco se fue reuniendo más cantidad de gente entorno a él y la comitiva comenzó a descender hasta la parte baja de la plaza donde le esperaban las carretas.

Además de ser la primera romería del año en la Isla, Tigaiga también se distingue por ser el núcleo que abre y cierra el calendario de fiestas municipal. El 25 de diciembre los vecinos de esta zona representan el tradicional Belén Viviente y el 5 de enero la Cabalgata de los Reyes Magos también culmina en este punto con la Adoración al Niño Jesús. Ayer, con la celebración de la tradicional romería, el núcleo volvió a vestirse de gala para vivir una nueva fiesta.

"Nosotros quitamos los adornos de Navidad y nos ponemos el traje de mago", asegura Alba Luis que asistió este domingo a la romería acompañando a la carreta de la familia González. Tanto ella como sus compañeros acude cada año a esta romería, que asegura que en las últimas ediciones se ha ido haciendo cada vez más popular y recibe la visita de mucha gente de fuera de esta zona del municipio.

En esta jornada también estaba previsto que se realizara la bendición del ganado y de otras mascotas, tal y como marca la tradición, al ser San Antonio Abad el patrón de los animales.

Una vez finalizado el recorrido romero, que estaba previsto que culminara sobre las 17:00 de la tarde, los que siguieran teniendo ganas de fiesta pudieron disfrutar de la música de la verbena que tuvo lugar en la calle Tigotán de este núcleo realejero y exprimir hasta el último segundo la primera romería del año.