Las administraciones públicas están acostumbradas a destinar cantidades importantes del dinero de todos a reparar destrozos causados por actos vandálicos en espacios y mobiliario públicos. Las pintadas y la rotura de bancos, papeleras o contenedores son tan habituales que casi han dejado de ser noticia, pero aún hay gamberradas que, por cuestiones simbólicas, religiosas o sentimentales, duelen y enfadan un poco más de lo habitual. El alcalde de La Guancha, Antonio Hernández (PP), hizo pública este jueves su indignación por la decapitación del San José del belén municipal, en la pasada noche de Reyes, una gracia sin ninguna gracia que costará al consistorio en torno a 3.000 euros.

"No es la primera vez que sufrimos ataques y robos en el belén que se ubica enfrente de la plaza de Las Ferias. En otras ocasiones se han llevado al niño o alguna otra figura, pero lo ocurrido con el san José ya cabrea. Estoy cansado de irresponsables que no respetan lo público", explicó a EL DÍA.

"No creemos que sea posible reparar la figura de cerámica, aunque consultaremos a alguna empresa especializada -indicó el alcalde-, pero la gente debe saber que costó unos 3.000 euros a este ayuntamiento, que ahora no sirve para nada y que lo más probable es que tengamos que comprar otra porque a alguien se le ocurrió hacer la gamberrada. Le arrancaron la cabeza y la destrozaron, sólo se han encontrado pedazos".

Hernández detalla que en otras ocasiones la Policía Local ha logrado intervenir a tiempo: "Los agentes han evitado antes que algunos adolescentes se llevaran alguna figura o rompieran algo, pero en esta ocasión no se ha podido identificar, por ahora, al autor o autores".

Las cámaras de la Policía Local en esa zona no estaban en funcionamiento cuando se produjo la gamberrada, "ya que estamos en proceso de renovación para contar con unos dispositivos con mejor resolución", explicó el alcalde.

Mientras la Policía Local de La Guancha investiga para tratar de encontrar al responsable o responsables de este acto vandálico, el alcalde llama a a la reflexión: ¿Qué molestia causaban esas figuras y qué han conseguido con esta acción? Los responsables deberían pensar que sus daños se van a pagar con el dinero de los impuestos que pagan también tus familiares. Solo pedimos respeto a lo que es de todos".