El Círculo de Bellas Artes de Santa Cruz no se rinde. La licencia especial de apertura concedida hasta el 5 de enero no es suficiente. Sobre todo, ante la posibilidad de que, en cuanto Merkarte (Mercado del Arte en Navidad) ponga el candado, las opciones de organizar actos en las instalaciones ubicadas en la calle Castillo queden definitivamente postergadas hasta que se ejecute una reforma integral cara -que se ha valorado en más de un millón de euros- y larga.

La pianista tinerfeña Esther Ropón, presidenta en funciones de la histórica institución cultural capitalina, ya ha cerrado un encuentro con el arquitecto andaluz Juan Miguel Hernández León, presidente del Círculo de Bellas Artes de Madrid desde el año 1995, para conversar sobre la delicada situación por la que atraviesa uno de los referentes más sólidos de la sociedad local. "A un hermano mayor hay que contarle todo; incluso los problemas", ratificó desde Alemania la tinerfeña sobre una reunión que tendrá lugar el 11 de enero en Madrid.

La cita entre los máximos responsables de los Círculos de Bellas Artes forma parte de una estrategia que la directiva que ahora lidera Ropón está ejecutando con el objetivo no solo de poner en relieve la fragilidad financiera del centro -en anteriores artículos se hizo referencia al impago de varios recibos asociados a servicios de primera necesidad-, sino el riesgo que existe de caer en una situación de olvido. "Este año la mayoría de los esfuerzos se concentraron en explicar a la ciudadanía la precaria situación económica por la que atraviesa el Círculo de Bellas Artes y ese proceso ha supuesto un enorme desgasta que, de momento, se ha traducido en buenos propósito y la asignación de unas partidas presupuestarias que aún no se han materializado: Gobierno de Canarias, Cabildo de Tenerife y Ayuntamiento de Santa Cruz están dispuestos a colaborar.

Entre las tres Administraciones se ha amarrado una financiación que en estos momentos supera los 750.000 euros. "Si se convierte en realidad es un buen empujón, pero una rehabilitación de un edificio de cuatro plantas, que no es un BIC, pero que sí está en una zona protegida, puede ser tremendamente costosa".

Carta a Hernández León

En la carta que Ropón hizo llegar a Juan Miguel Hernández León no se especifican cada uno de los problemas detectados en los últimos años en el Círculo de Bellas Artes de Tenerife. La lista es larga. La petición se centra básicamente en lo que pasará a partir de la segunda semana del próximo mes de enero. "No podemos parar las actividades y lo único que estamos reclamando en estos momentos es encontrar lugares alternativos -céntricos y en las condiciones adecuadas- para organizar eventos y exposiciones".

A la espera de ver qué es lo que ocurre con el convenio de rehabilitación, el mensaje que Esther Ropón -en la actualidad reside en Alemania- a Hernández León es la voluntad de los socios para seguir siendo una sociedad abierta a la pluralidad de las artes y libre... El Círculo de Bellas Artes siempre ha sido la casa de los creadores, de la gente que históricamente tuvo esa libertad para dar a conocer su mensaje", agradece sin dejar de plantear que otra de las opciones que se podrían valorar en estos momentos es ampliar la licencia que nos han concedido en navidades para ejecutar una agenda estable que no frente el trabajo que se ha desarrollado en los últimos tiempos", remarca en un instante de la entrevista en la que incide en el hecho de que 2019 ha sido un año más burocrático que de exhibición de los proyectos que en condiciones normales se deberían programar en un centro de estas características.

"Hemos estrechado lazos con instituciones que tienen un perfil parecido porque entendemos que es el momento de abordar de una manera conjunta la defensa de un edificio que no se puede cerrar sin que exista un compromiso de que volverá a ser la luz de la cultura de Tenerife, o en su defecto, podremos seguir exponiendo nuestras ideas sin tener que estar rogando un lugar... Sabemos que cerrar sin encontrar una solución alternativa es un peligro que ya le hemos manifestado a otros colegas -Juan Miguel Hernández León, por citar un ejemplo que está próximo, está al tanto de la realidad que vive el Círculo de Bellas Artes por los testimonios que le han trasladado tinerfeños que están ligados a la cultura- que no nos podemos conformar con unas soluciones intermedias que solo van a acentuar este problemática".

Ropón, que en el momento de la conversación aún desconocía la partida económica que ha reservado el Cabildo de Tenerife a la espera de concretar el calado real de la intervención en el edificio, destacó que, por ahora, hemos obtenido muchas palabras que van a alimentar la esperanza de que el año que está a punto de empezar pueda ser algo más tranquilo que este. "No nos vamos a olvidar de los problemas que afectan al Círculo de Bellas Artes, y la mejor manera de que eso no ocurra es seguir ofertando actividades, aunque estas no se lleguen a organizar en el espacio que estos días acoge Merkarte sin ningún tipo de problemas", remarca la presidenta en funciones de una entidad que no está dispuesta a rendirse.