En mitad del recorrido puede aparece un pastor, o una lavandera. Oficios de otro tiempo que regresan por un instante, como una imagen onírica, a los mismos senderos que transitaron siglos atrás en su camino hacia La Laguna o Santa Cruz. Así es la propuesta de rutas turísticas que viene desarrollando el PFAE-GJ Rosatur, un programa formativo en el que los alumnos brindan esta fórmula distinta, con toques de teatro, para conocer El Rosario y su ayer.

PFAE son las siglas de Programa de Formación en Alternancia con el Empleo y GJ, de Garantía Juvenil. Este depende del área de Empleo del Ayuntamiento de El Rosario y tiene como director a Sergio García, que detalla que el proyecto está cofinanciado por el Fondo Social Europeo, el Gobierno de Canarias, Garantía Juvenil, el Servicio Canario de Empleo (SCE) y el Consistorio, que, además, solicitó el programa al SCE. Cuenta con quince alumnos, todos menores de 30 años y residentes en El Rosario.

"Dentro del certificado se incluye, como contenido teórico y práctico, la interpretación del patrimonio natural y cultural, pero, para este proyecto, hemos considerado oportuno añadir como formación complementaria la planificación de itinerarios y conducción de grupos, la dinamización de actividades o las artes escénicas aplicadas al turismo", contextualiza García. Y fue de ahí, y entre otros servicios que realizan, que surgieron las rutas.

Las explicaciones del director ponen a las claras que los recorridos no es que se caractericen precisamente por la improvisación: "El alumnado ha investigado en todo el municipio, ha entrevistado a muchas personas que ejercieron esos oficios, ha hecho un inventario de recursos patrimoniales... Con todo ello, ha diseñado una serie de rutas turísticas que son cómodas para que pueda disfrutarlas toda la familia, utilizando tramos de senderos señalizados y otros de pistas forestales, pero también en la costa".

Durante el transcurso de las rutas se hacen una serie de paradas. "Se le explica a la gente, hablamos de naturaleza... y de repente, en algún punto, salen alumnos, sin que los asistentes lo esperen, ataviados con ropa de la época", manifiesta Sergio García.

La primera edición

Esta es la primera edición del PFAE-GJ Rosatur y, durante los once meses que dura la formación (empezó en abril y terminará en marzo), lo habitual es que ofrezcan un recorrido al mes, los sábados. "También los hemos realizado por eventos concretos, como es el caso del Saborea El Rosario, o para colegios o algún grupo específico", agrega el máximo responsable del programa formativo. Las fechas las anuncian en la página de Facebook PFAE-GJ Rosatur-Promoción turística local e información al visitante, al tiempo que responden a través de su correo electrónico y utilizan la web del Ayuntamiento para difundir. Están planeando la nueva edición de la ruta enogastrohistórica por Machado, que es posible que se celebre en enero, y la de los almendros en flor, para febrero.

¿Qué supone todo lo anterior? Una opción de cultura y ocio, así como de promoción del patrimonio rosariero; pero, sobre todo, que los alumnos cuenten con una herramienta que les dé un rodaje para el que es el objetivo último del programa: conseguir trabajo vinculado al certificado de profesionalidad Promoción turística local e información al visitante.