Tenerife registra su tercer año con valores pluviométricos por debajo de la media. Una situación que está afectando a los cultivos de secano, en especial a las papas, la viña y los cereales, que ya arrastran pérdidas en su producción.

Los datos pluviométricos recogidos por Agrocabildo indican que en algunos puntos de la Isla este año ha llovido menos de la mitad de la media registrada entre los años 2001 y 2016. Un hecho que perjudica, principalmente, a la medianía y zonas altas del Sur, como son los casos de los municipios de Guía de Isora, Arico y Vilaflor.

El consejero de Agricultura, Ganadería y Pesca del Cabildo de Tenerife, Javier Parrilla, afirmó que desde la Corporación insular se está trabajando para paliar esta situación. A su juicio, el futuro de la agricultura en la Isla pasa por incrementar la producción de agua desalada y regenerada. En este sentido, apuntó al buen funcionamiento que está teniendo la experiencia que se desarrolla en Valle de Guerra, donde la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de la zona está surtiendo de agua de riego a los agricultores de la comarca. Un proyecto que quiere replicarse en Adeje a través de su estación depuradora de aguas residuales. "Se está trabajando ya para que pueda ponerse en marcha", señala el consejero insular.

Parrilla afirma que, según los informes técnicos, la calidad del agua regenerada que se está produciendo en las instalaciones tinerfeñas es "óptima", ya que los niveles de conductividad son los apropiados para que esta agua se destine al riego agrícola.

La capacidad de la Isla para almacenar agua en los 21 embalses que gestiona Balten asciende a 5.006.132 metros cúbicos, pero los mismos estaban al 44% de su capacidad hace 20 días, con 2.201.756 metros cúbicos de agua.