Florentín Magdaleno ocupó ayer el sillón presidencial de un salón de plenos del Cabildo en el que se habían tornado los papeles y quienes habitualmente ocupan sus asientos como consejeros se acomodaron entre el público para escuchar lo que los más pequeños de la Isla les tuvieran que decir. De esta manera, Magdaleno dirigió la sesión como presidente por un día y una veintena de sus compañeros del colegio Bethencourt y Molina siguieron con atención los diferentes puntos del pleno y ratificaron con su votación la elección del logotipo, que representará a la iniciativa durante el año y que ha sido elaborado por estos mismos escolares.

Durante su intervención, Magdaleno valoró esta iniciativa, pero no dudó en realizar una serie de recomendaciones para mejorarla el próximo año. Aún así, recomendó a todos los escolares que participaran en él porque los niños "tenemos mucho que decir" y proyectos como este "reconocen la necesidad de que nuestras voces sean escuchadas".

El joven no dudó en reconocer que tener que hacerse cargo de la presidencia del Cabildo por un día le ponía algo nervioso, pero insistió en que gracias a este proyecto tanto él como sus compañeros han podido conocer el trabajo que se hace en la Corporación tinerfeña y experimentado en primera persona "cómo es un proceso democrático".

Aunque en un principio sus compañeros se mostraron reticentes a intervenir en el pleno, después de que una de ellas rompiera el hielo fueron varios los que también pudieron explicar en público lo que había supuesto para ellos la iniciativa. Al final, incluso se atrevieron a cantarle el cumpleaños feliz al presidente insular, Pedro Martín, que ayer estaba de aniversario.

El mandatario tinerfeño explicó a los menores que el salón de plenos es el lugar "donde se toman las decisiones importantes de la Isla" y subrayó que iniciativas como la de Presidencia por un día ayudan a difundir las funciones del Cabildo, una administración que aunque es muy conocida "no siempre se sabe cuales son sus competencias".

Martín insistió en que a través de este proyecto los escolares han aprendido a ponerse de acuerdo y negociar para consensuar la realización del logotipo, que finalmente resultó ganador al ser el más votado por el resto de los colegios participantes. "Esta es la misma situación que ocurre aquí, donde todos tenemos una manera distinta de entender Tenerife, pero a todos nos nueve el interés de hacer la Isla mejor", concretó. "Quizá en el futuro algunos de ustedes estén aquí representándonos a todos", valoró.

El consejero de Participación Ciudadana y Diversidad, Nauzet Gugliota, fue el encargado de respaldar al presidente por un día en la moderación del pleno, al que asistieron representantes de todas las fuerzas políticas. Gugliota destacó este tipo de iniciativas como una manera de escuchar a los más jóvenes que "se hacen preguntas que a los adultos no se nos ocurren".

El pleno concluyó con un "se levanta la sesión", con el que Magdaleno puso fin a un acto en el que los niños pudieron alzar la voz y ponerse por un día en la piel de sus representantes.