El alcalde de Arico, Sebastián Martín, anuncia que el gobierno municipal que asumió anteayer la gestión del Consistorio pagará la deuda contraída por el Ayuntamiento en el mandato anterior y durante los primeros cinco meses del actual, "para devolver la normalidad a la administración y a los servicios públicos". Hechas las consultas previas con la interventora, indica que "la única vía que hay es pagar los servicios que se están prestando, con la discrepancia del informe de Intervención, pero evitamos que la administración incurra en enriquecimiento injusto". Ello le lleva a concluir que "no habrá problema para abonar los servicios prestados, justificados y con expediente administrativo iniciado para su contratación. Si hay que levantar reparos, se hace sin ningún tipo de problema", asegura.

Con ello se despeja la causa fundamental de la moción de censura que le coloca como sexto alcalde de Arico en los 11 mandatos habidos desde 1979. El importe de las facturas impagadas correspondientes a servicios y provisiones superó 1,2 millones de euros porque la exalcaldesa, Olivia Delgado, no levantó reparos, atribución exclusiva de la Alcaldía, señala.

En el listado de urgencias del tripartito está resolver el problema de la limpieza de los colegios desarrollando la fórmula para normalizar la situación de las trabajadoras, desbloquear proyectos como la plaza de Villa de Arico, el arreglo de calles -cuentan con presupuesto para ello-, elaborar el presupuesto de 2020 y, sobre todo, "pagar a los proveedores. No podemos continuar con la Policía Local, Servicios Sociales y Obras y Servicios sin telefonía. No podemos mantener un inadecuado servicio de internet, ni a talleres y ferreterías esperando a cobrar".

El alcalde hizo mención aparte a la guardería municipal, a la que también aseguró que pagarán los 60.000 euros de deuda generada durante los cinco primeros meses de este mandato, "con el agravante de que parte de ese dinero lo abonaron al ayuntamiento los padres de los niños beneficiarios".

Analizando la crispada sesión plenaria celebrada anteayer, Sebastián Martín (PA), Juan José Armas (CC) y Andrés Martínez (PP) coinciden en la necesidad de "pasar página" a "momentos desagradables, con rasgos antidemocráticos y con personas que no garantizaron el desarrollo del pleno con tranquilidad. Lo que toca es gobernar y resolver los problemas de los ariqueros". El popular Martínez fue más claro: "Los acontecimientos del pleno son fruto de que algunos políticos socialistas estuvieron incitando, antes y durante el pleno, a comportamientos indignos. Hubo insultos de concejales a concejales. La manifestación es lícita y respetable, lo ocurrido ayer (por el lunes), no".