Personal técnico del Cabildo de Tenerife y de la empresa pública Tragsa informarán a los vecinos de Tacoronte de las medidas que se han tomado para erradicar del municipio la especie de termitas "Reticulitermes flavipes", ha informado este lunes la concejal Medio Ambiente y Sostenibilidad, Carmela Díaz.

La información será ofrecida el miércoles próximo y, en un comunicado del Ayuntamiento de Tacoronte se recuerda que la junta de gobierno insular ha acordado destinar este año un millón de euros a esas labores.

Además, añade la corporación municipal, el biólogo de la Universidad de La Laguna (ULL) David Hernández ha certificado que el ozono es eficaz para eliminar este insecto, tal y como se ha demostrado después de una serie de experimentos.

No obstante, matiza que para obtener un éxito absoluto es preciso contar con mejor maquinaria que la utilizada hasta ahora.

Explica el Ayuntamiento de Tacoronte que en la última prueba llevada a cabo la semana pasada se consiguió casi un cien por cien de efectividad, pero también se comprobó que esa técnica da mejores resultados en troncos secos que en verdes.

La importancia de este método y el interés que ha puesto el Ayuntamiento de Tacoronte en el mismo es que podrá utilizarse para eliminar este insecto de los muebles o enseres infectados, se añade en el comunicado.

El biólogo realizará ahora un informe a la Corporación local en el que reflejará sus conclusiones.

En la última prueba se comprobó que varios individuos sobrevivían mientras que en otros la muerte era casi instantánea, por lo que ahora se intentará aumentar la cantidad de ozono empleada y mejorar las condiciones de la cámara donde se realiza el experimento.

En el experimento finalizado la pasada semana se mejoraron las condiciones del anterior realizado en Valle de Guerra, en La Laguna, dado que en ese momento sólo pudieron utilizarse equipos portátiles.

En la segunda ocasión se montó un dispositivo con el doble de potencia y una refrigeración y cámara más adecuada, y la prueba se llevó a cabo en unas instalaciones que la empresa tiene en Güímar, donde se optó por usar troncos con presencia de otra especie de termita, la Cryptotermes brevis en vez de la Reticulitermes flavipes que es la que afecta al municipio.

El objetivo, según el técnico, es que no se registre ningún "escape" de la termina subterránea en otro municipio. El biólogo indica que desde el punto de vista biológico, "son especies similares, y por tanto, los resultados serían aplicables a los dos casos".

Una vez que las conclusiones de la segunda prueba han sido, en general positivos, se intentará hacer otro experimento en el ámbito más afectado, entre ellos Tacoronte, se señala en el comunicado.