La capital de Halloween en La Laguna es la Urbanización Pueblo Hinojosa. Si había alguna duda, ayer se demostró de una forma, si cabe, más diáfana. Las brujas, los esqueletos y los muertos vivientes recorrieron las calles de este enclave de la Finca España en una tarde-noche marcada por la diversión. La cita volvió a hacer gala de la que ha venido siendo durante los últimos años una de sus grandes señas de identidad: su ambiente familiar.
Días atrás, el Ayuntamiento de La Laguna lo vio venir y convocó a la Asociación de Vecinos La Unificación, de Finca España, para abordar medidas relacionadas con la afluencia del acto y el tráfico rodado. Tampoco era muy difícil vaticinar lo que podía ocurrir: el crecimiento de esta jornada en Pueblo Hinojosa ha sido continuado. Como era previsible, este jueves no fue sencillo llegar y aparcar en la zona... aunque el verdadero colapso fue de ganas de pasárselo bien y de vivir momentos terroríficos.
Las viviendas adosadas de este enclave fueron decoradas -algunas, incluso, con muy trabajados diseños compuestos por telas de araña y diversos elementos propios de la estética de esta celebración- y sus residentes hicieron acopio de golosinas. Por esas casas fue transitando un río de niños (y alguno no tan niño) que ya hace años que tienen marcado en rojo en sus agendas el Halloween de Pueblo Hinojosa.
La pujanza de esta festividad es cada vez mayor, pero su entrada en La Laguna en su conjunto ha sido relativamente lenta. Se da la circunstancia de que otros dos de los lugares en los que cuenta con mayor fuerza son barrios vecinos de Finca España: La Verdellada y Barrio Nuevo, cuyos colectivos abren las puertas de una casa del terror solo apta para los poco miedosos.
