Como consecuencia de "los continuos incidentes de vertidos de aguas residuales, tanto al mar como a las zonas residenciales", la Asociación Barrios Unidos de Granadilla de Abona (BUGA) demanda del gobierno local "que proceda a encargar una auditoría externa e independiente, pero inmediata" sobre el estado de la red de saneamiento.

Asimismo, plantean la realización de "inspecciones técnicas de los vertidos y desbordamientos en puntos que no están conectados al alcantarillado", caso de zonas de la medianía, "y la inspección de las condiciones en las que se encuentran las estaciones de bombeo y el desarrollo de su mantenimiento".

De la situación actual, BUGA desprende que la empresa concesionaria responsable del mantenimiento del alcantarillado público, Entemanser, "no está cumpliendo con las obligaciones contraídas por contrato con el Ayuntamiento" y señala como "inexplicable que, después de tantos incidentes, no se haya abierto siquiera un expediente informativo por parte del gobierno local".

Desde la Concejalía de Servicios Generales y Medio Ambiente se asegura que, atendiendo a la información recabada de Entemanser, "no se ha producido ningún vertido de aguas fecales en el municipio durante el presente año 2019", llegando a explicar que "tras el cero energético que se produjo el 29 de septiembre, no hubo problemas ni incidencias en la red de saneamiento ni abastecimiento, debido al operativo de emergencia". También afirma que "es prioritario el estado del saneamiento".