El XI Encuentro de Mujeres Rurales de Tenerife estuvo protagonizado ayer, en la Casa del Vino, por cinco mujeres pioneras del sector vitivinícola en Tenerife: las bodegueras y viticultoras Carmen Gloria Ferrera Tejera (Bodegas Ferrera), Cecilia Farráis Lorenzo, Chila (de Bodega Tajinaste), y Fátima Hernández Guillama (Bodegas LoHer), y las especialistas en viticultura y enología Antonia Castro Castro, de la empresa de asesoramiento agrícola Benaiga, y Trinidad Fumero García, técnica desde hace 25 años en el Consejo Regular de la Denominación de Origen (D.O.) Abona.

Con la moderación de María Eugenia Trujillo, las asistentes detallaron algunas de sus experiencias en un mundo como el del vino que tradicionalmente se había considerado "cosa de hombres". Un prejuicio que estas cinco mujeres han ayudado a desmontar a base de esfuerzo, constancia y trabajo.

Ferrera y 'Chila' Farráis recordaron sus orígenes en el sector, que en el caso de la bodega familiar Tajinaste se remontan a 1979, "cuando empezamos a embotellar, medio en broma, un vino que se llamaba Ratiño, como la finca donde tenemos las viñas". La prestigiosa marca Tajinaste nació a principios de los años 80 del siglo XX y tiene el futuro asegurado gracias al hijo y al nieto de su creadora que, junto a su marido carpintero, lograron hacerse un nombre dentro y fuera de Canarias.

Fátima Hernández detalló los difíciles comienzos, en 2013, de la bodega LoHer, "donde al principio sólo trabajaban hombres"; Antonia Castro recordó las dudas que tuvo que superar antes de iniciar, en el año 2000, una empresa de asesoramiento agrícola, y Trinidad Fumero subrayó el esfuerzo realizado para superar, poco a poco, las reticencias de un sector poco acostumbrado a dejarse guiar por expertas.

Carmen Gloria Ferrera, que lidera una bodega que antes llevaron su abuela y sus tías, reconoció que descubrió el machismo vitivinícola durante su etapa como presidenta del Consejo Regulador del Valle de Güímar.

El acto concluyó con una cata comentada por María Hontoria Fernández, responsable de la Unidad de Enología del Cabildo tinerfeño.