El Consejo Insular de Aguas de Tenerife (CIAT) se ha convertido en el mayor consumidor de energía eléctrica de la Isla al invertir 17 millones de euros en mantener operativas todas las instalaciones dependientes del ente, un coste que le sitúa en "el mejor cliente" de las compañías energéticas en Tenerife.

En este caso, se trata solo de una parte del coste que supone para la Corporación insular el mantener la dotación energética de sus instalaciones, ya que a esos 17 millones del consumo energético del propio Consejo se le suman otros 1,7 millones que se invierten para mantener los edificios y sedes del Cabildo de Tenerife, las convencionales al margen del propio CIAT.

Se trata de los datos manejados por el consejero del área de Desarrollo Sostenible y Lucha contra el Cambio Climático, Javier Rodríguez (PSOE), ante la próxima aprobación de los pliegos para la licitación y adjudicación de energía eléctrica para todos los edificios de la Institución insular.

En este caso, el también ingeniero resaltó que "el contrato energético para cubrir la demanda de todas las instalaciones del Cabildo se eleva a los 1,7 millones de euros al año, mientras solo el CIAT alcanza los 17 millones, convirtiéndolo en el máximo consumidor de energía en la Isla de Tenerife".

El máximo responsable del área afirmó que en la redacción de los pliegos para la licitación y adjudicación de energía eléctrica del próximo contrato, tanto para los edificios del Cabildo como para las instalaciones que tiene el Consejo en la Isla, "hemos incluido cláusulas verdes, de forma que nosotros garanticemos que el suministrador de energías compre en el pool (mercado mayorista) energía limpia".

"El ciudadano puede pensar en energía limpia procedente de los molinos eólicos y las plantas fotovoltaicas que tenemos aquí, pero no funcionan las cosas de esta manera, ya que acudes al mercado nacional. En este ámbito, si existe la demanda de energía verde por parte de las grandes empresas en respuesta a las solicitudes ciudadanas, los grandes del sector energético se ven obligados o comprometidos a invertir en este tipo de energías, porque se empuja para que sea así", dijo Javier Rodríguez.

El consejero puso en valor esas cláusulas verdes en los contratos energéticos que suponen al año 1,7 millones de euros, en cuanto a las instalaciones se refiere, y los 17 millones del Consejo.

El consejero explicó que las necesidades del Consejo Insular de Aguas son mucho mayores que otras áreas de la Corporación insular, teniendo como referencia el trabajo que realizan las desaladoras o las depuradoras, entre otros sistemas que necesitan bombear aguas a cotas superiores, por ejemplo, lo que hace que "el gasto sea muy muy elevado. Es el mayor consumidor de energía eléctrica de la Isla", afirmó.

Esa peculiaridad hace que el CIAT sea un cliente preferente que permite llegar a acuerdos con el suministrador, "de forma que las empresas energéticas, para no sobredimensionar en exceso sus redes en momentos punta de demanda, puedan interrumpir el servicio para garantizar el suministro convencional. Pasada la punta se restablece el servicio al CIAT", apuntó Javier Rodríguez.

Desarrollo de proyectos

El consejero de Desarrollo Sostenible y Lucha contra el Cambio Climático, Javier Rodríguez, quiso poner en valor "el gran trabajo" de su antecesor en el cargo, Manuel Martínez (PSOE), y el equipo de funcionarios y técnicos del área. En este punto destacó el desarrollo de proyectos que en la actualidad se está ejecutando por parte del CIAT en todas las comarcas de la Isla, lo que -reconoce- ha facilitado el trabajo en estos primeros meses, que complementará las líneas de actuaciones y proyectos.