El Pioneering Spirit tiene un gran timón de madera de más de un metro y sesenta centímetros en el puente de popa. Se trata del único elemento que recuerda al pasado y solo sirve para hacerse fotos. Hasta ahí llegan las licencias al romanticismo. Todo en este megabarco, que es un prodigio de la ingeniería naval, está concebido a lo grande, con la última tecnología y con la máxima agilidad y funcionalidad. Se le considera el buque con mayor volumen del mundo y tiene capacidad para realizar trabajos que no efectúan otras embarcaciones. Pero ni siquiera ese título es suficiente motivo para que la compañía propietaria, la suiza Allseas, se conforme y se duerma en los laureles. En realidad, cada cierto tiempo incorpora nuevos equipamientos que le permiten una mayor efectividad y afrontar más servicios. Es decir, que no para de transformarse y evolucionar.

La construcción de este gigante comenzó en 2011 y acabó en 2014. El proceso se inició en China y el ensamblaje final se efectuó en Corea del Sur, en los astilleros de Daewoo Shiping Building. Según la Autoridad Portuaria, en Granadilla es la primera vez que está atracado en un puerto, debido a sus dimensiones y a que su desplazamiento no resulta sencillo. Pero en el recinto portuario de Granadilla, aún en obras, hay espacio de sobra.

Este barco tiene capacidad para elevar la caseta de una plataforma petrolífera y llevarla a puerto o cambiarla de lugar, después de cortar las conducciones que la unen a sus bases. Para ello cuenta con grandes vigas en la zona de proa que levantan 48.000 toneladas. Además, las grúas de popa disponen de una potencia de elevación de otras 20.000 toneladas, lo que permite subir enteras las estructuras metálicas de los pozos de perforación o jackets. La tercera principal cualidad del Pioneering Spirit se basa en el stinger, un asombroso aguijón de estructura tubular que lleva en el área de proa y por el que introduce en el mar tuberías de, por ejemplo, metro y medio de ancho, que son ensambladas dentro del propio buque, a un ritmo que puede llegar a más de seis kilómetros cada día, con segmentos de 12 y 24 metros. En el Sur de Tenerife se le harán varias mejoras, como la limpieza y pintado de los cascos, adecuar y reforzar la potencia de los elevadores de popa, limpieza y mantenimiento de los propulsores o, por ejemplo, la introducción de unas poleas gigantes (winches) en sus flancos.

El capitán del buque, el holandés Sebastian Algra, explicó que desde el puente de proa se controlan, por ejemplo, las operaciones náuticas, las tuberías que se introducen en el océano, el levantamiento de plataformas o, entre otras cosas, el llenado o vaciado de los tanques de agua (con capacidad para 800.000 metros cúbicos), con los que la embarcación logra estabilidad cuando debe elevar grandes estructuras.

Se estima que las reformas, que se prolongarán durante tres o cuatro meses, pueden dejar en la Isla, al menos, un millón de euros en diferentes empresas, lideradas por Tenerife Shipyards.

¿Por qué se eligió Granadilla? Edgar Carnero es representante de la consignataria, Alfaship, y menciona las ventajas técnicas. Aclara que el puerto del Sur de la Isla "es una infraestructura muy moderna; con defensas adecuadas (lo que separa el casco del dique); con norays que soportan 200 toneladas de un tiro". Apunta que este recinto resiste ingentes pesos por metro cuadrado. Pero, sobre todo, tiene un calado muy elevado, que va desde los 23 metros junto a la línea de atraque hasta los 50 en el centro. Y esa amplitud de espacio resulta clave para que los buceadores puedan retirar los propulsores, entre otras cosas. Carnero indica que dicha profundidad fue determinante para que el Pioneering Spirit esté en Granadilla y no en el puerto grancanario de Arinaga.

El portavoz de Alfaship también resalta el interés mostrado por la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife para atender la demanda y su rapidez en dar una respuesta afirmativa sobre la disponibilidad de espacio. La naviera Allseas traerá en las próximas semanas otros dos buques a Granadilla, como son el Lorelay y el Fortitude. Si las actuaciones se saldan con éxito, la compañía podría seguir contando con Granadilla, según Edgar Carnero.

Cuatro meses para 'vencer' a Rotterdam

Airam Díaz Pastor es director comercial de Puertos de Tenerife y ayer ejerció de traductor durante buena parte de la visita al coloso. Díaz señaló que los puertos de Rotterdam y Granadilla se disputaban la posibilidad de servir de base a las mejoras en el Pioneering Spirit. Según el directivo de la Autoridad Portuaria, "estuvimos más de cuatro meses para presentar nuestra oferta". Mencionó que la infraestructura del Sur de Tenerife cuenta con mucho espacio y, además, "se han ofrecido unas tasas muy competitivas". Al igual que Carnero, citó la gran profundidad del puerto. En opinión de Díaz Pastor, desde noviembre de 2017, en el recinto situado frente al Polígono Industrial de Granadilla se han efectuado 300 operaciones portuarias, unas de escasa relevancia y otras vinculadas con la descarga de aerogeneradores y gas; la carga de chatarra, neumáticos triturados, así como el atraque de tres plataformas petrolíferas y dos buques perforadores. El trasiego de camiones que cargan y descargan junto al buque de Allseas es constante. Y taxistas con licencia de Granadilla transportan a grupos de trabajadores asiáticos del barco que, en sus horas libres, se acercan a pueblos cercanos para comer, beber o intentar divertirse. Se estima que estos días operan en el buque unos 450 empleados.