Una empresa especializada ha llevado a cabo este martes una prueba para erradicar las termitas de los enseres por medio de una cámara de ozono. En el experimento estuvieron presentes la concejal de Medio Ambiente y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Tacoronte, María Carmela Díaz, técnicos municipales y el biólogo David Hernández, además de los representantes de la compañía.

La concejal indicó que la prueba se enmarca en la preocupación que existe por eliminar estos insectos de los enseres al ser uno de los principales métodos de dispersión de la plaga. El experimento hecho hoy se enmarca en el interés del Ayuntamiento de conocer y valorar todas las alternativas que "no sean contaminantes". Este tipo de experiencias, según la concejal, "deben ser, en principio, apoyadas cien por cien".

Díaz señaló que la Corporación local tomará una decisión después de conocer las conclusiones del biólogo que plasmará en un informe. "A partir de ahí veremos qué posibilidades tiene este sistema para ser útil y cuándo y en qué casos se podría aplicar. Por ejemplo, sería muy válido si se usara para eliminar la termita de elementos como cuadros o muebles de gran valor que de otra forma podrían destruirse totalmente", dijo.

Vicente González, de la empresa que realizó hoy el experimento, explicó que en primer lugar recogieron termitas tanto en el exterior como en el interior de una vivienda afectada. Posteriormente las introdujeron en unas probetas y desplazaron el oxígeno con nitrógeno para luego hacer que entrara el trioxígeno u ozono con el fin de que circule de forma continua.

El experimento se alargó hasta las tres de la tarde de hoy y al finalizar el biólogo señaló que los resultados habían sido "en principio positivos" aunque hace falta que avancemos más en este proceso. "No hay nada definitivo pero por lo menos estamos ante una nueva e interesante vía que es posible explorar", indicó.

De hecho, se trata de un proceso que puede durar alrededor de entre diez a doce horas para que sea totalmente efectivo. Durante este tiempo los distintos enseres infectados serían introducidos en una Cámara para proceder a su limpieza. González indica que se trató de una primera toma de contacto y ahora se seguirán haciendo futuros ensayos para conseguir los resultados deseados. Al no haberse aniquilado la totalidad de las termitas sobre las que se hizo el experimento se probará si es necesario aumentar el ozono.

Este procedimiento ha arrojado resultados positivos con la polilla guatemalteca cuando la plaga se extendió en Icod, hasta el punto de lograr su desaparición total. En ese caso la papa infectada se introducía en la Cámara y después era perfectamente comestible.