El presidente del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín, anunció ayer que los tubos de la canalización de agua de riego rota en la tarde del pasado lunes en la zona de Los Moriscos, en Santa Cruz de Tenerife, serán instalados este fin de semana. Martín visitó a primera hora de ayer la obra, acompañado del consejero insular de Agricultura, Ganadería y Pesca, Javier Parrilla.

Ambos comprobaron que ya han llegado a Tenerife los tubos, de fundición dúctil de 80 centímetros de diámetro y seis metros de largo, procedentes de Gran Canaria. Paralelamente, el consejero informó al presidente de que se estaban terminando de fabricar las dos estructuras metálicas que permitirá la sujeción de los tubos. Se trata de dos vigas de 400 milímetros que se han hecho ex profeso, y en tan solo tres días para solventar este problema que podía dejar sin agua de riego a todo el sur de la Isla.

La culminación de esta obra podría suponer el inicio de las pruebas la próxima semana y así poder reanudar el servicio a la mayor brevedad.

Martín da instrucción de aumentar la producción de agua desalada para evitar el desabastecimiento

Por otra parte, el presidente insular ha dado instrucción de revisar el trazado de la tubería para conocer si existiera algún problema en algún punto. Igualmente se hará acopio de este tipo de tubos, de unas características especiales, debido a su diámetro, y a la resistencia que tienen a la presión del agua, para no tener que depender de un material que esté fuera de la Isla y poder actuar más rápidamente en el caso de que surja algún otro problema en el futuro.

Para evitar el riesgo de desabastecimiento, se sigue proveyendo agua desalada de la desaladora de Granadilla, que se suma a los caudales suministrados desde la balsa de El Saltadero y del depósito de Valle San Lorenzo.