En el claustro del Convento de los Padres Dominicos comenzaron anoche las fiestas en honor a la Patrona de Canarias, la Virgen de Candelaria, con el pregón de José Segura Clavell. La alcaldesa, María Concepción Brito, presentó al pregonero resumiendo su amplia trayectoria profesional y agradeciendo su compromiso con Candelaria al aceptar esta tarea, tras considerarlo "uno de los intelectuales canarios más sobresalientes de su generación".

Con referencias constantes a José Viera y Clavijo, para entender "la importancia de lo que tenemos", el pregonero aludió a la emoción del recuerdo de este día, "un momento en que nuestros sentimientos reflejan el cariño y la añoranza de quienes hoy ya no están aquí, aunque sigan presentes en nuestro corazón".

Segura hizo un guiño a la peregrinación al señalar que "las personas de mi edad recordamos desde nuestra niñez, llegada esta fiesta, los camiones con personas sentadas en los tablones en la trasera de los mismos que, procedentes de toda la geografía insular, acudían a la fiesta con ilusión; otras lo hacían caminando horas y horas por veredas y caminos empinados".

Recurrió a textos de san Francisco de Asís para concienciarnos de la importancia de cuidar el medio natural y entender que formamos parte de él, trayendo a colación una encíclica del papa Francisco para pasar a la acción y tomar medidas para cuidar la casa común y acabando en África -es el actual director de Casa África-, para entender que este problema (el cambio climático) ya está aquí, que lo tenemos en casa, y que debemos actuar todos sin perder ni un segundo más. "La crisis climática no es un fenómeno del que vivamos protegidos y aislados en nuestro Archipiélago canario", sentenció.

Animando a participar de las "fiestas de la Candelaria con alegría y, a la vez, con el cívico comportamiento del cuidado de nuestra casa en común", sus palabras dieron paso al recital lírico Íntimo, de Besay Pérez y la pianista Satomi Morimoto, quienes pusieron el broche final al acto inaugural de las fiestas de la Patrona.