La alcaldesa de San Juan de la Rambla, Fidela Velázquez (PSOE), mantiene una visión comarcal, más allá de los límites de su municipio, y reclama medidas que ayuden a evitar la decadencia del Norte de Tenerife. A su juicio, "el Norte se nos muere", y para evitarlo solicita "un plan de viabilidad económica que impida que los norteños tengan que marcharse a trabajar a otras zonas de la Isla y que revitalice la agricultura en las medianías".

¿Cómo está viviendo este inicio de mandato?

Pues bien, han sido unas semanas de continuidad porque afrontamos el final del mandato anterior con muchísimos proyectos en marcha. Varios de ellos pendientes sólo de la adjudicación o del inicio de las obras. Casos como el mercado de las medianías, que ya está en marcha, o el asfaltado de la urbanización El Pino a la TF-342.

¿Funciona el nuevo gobierno PSOE-AUP-SSP?

Estamos en un proceso de coordinación enriquecedor con nuestros socios de AUP-SSP. Está resultando muy interesante porque su aportación complementa y mejora nuestro conocimiento de las necesidades y carencias del municipio. Muchas de esas obras que van a empezar han sido consensuadas con ellos en el mandato anterior.

¿El mandato anterior les sirvió como ensayo de gobierno?

Por supuesto. Los presupuestos de 2018 y, sobre todo, el de 2019 nos permitieron dar a conocer esos proyectos que teníamos en marcha y, por su parte, plantearnos actuaciones que consideraban prioritarias. Ese presupuesto de 2019 tiene todas las inversiones consensuadas y eso nos permite seguir adelante. Mantenemos una reunión semanal, larga, en la que ponemos en común los proyectos que vinculan a varias áreas y los que corresponden a una sola. De esa manera todos tenemos conocimiento de todo. Por ahora, el nivel de satisfacción es muy elevado. No digo del 100%, porque siempre hay cosas que mejorar, pero sí muy elevado.

¿Ve posibilidades de acuerdo con la oposición?

Nosotros hemos mantenido la invitación al pacto de la concordia a AIS-CC, pero parece que hay un bloque compacto en la oposición. Hubo algún problema con la confección del grupo mixto, del que pretendían excluir a AUP-SSP, pero espero que entiendan que es un grupo plural. Aún no ha habido tiempo de valorar cuál será su actitud. Los plenos han sido correctos, por ahora. Hemos ampliado el número de sesiones del mínimo legal, que es trimestral, y mantenemos las sesiones plenarias cada dos meses, en horario de tarde, y la junta de portavoces, que dio muy buen resultado para desdramatizar los plenos. Y espero y deseo, y se lo pido a los portavoces de la oposición, que sigan colaborando en los asuntos de interés para San Juan de la Rambla. Y eso no es colaborar con este gobierno, sino con el pueblo.

¿Qué ocurrió en el pleno de la toma de posesión con la medalla del exalcalde Manuel Reyes?

Se produjo un incidente, yo creo que desafortunado. Don Manuel Reyes no lo pensó bien o no estuvo bien asesorado. No es comprensible en una persona que ha ostentado la Alcaldía haga ese desprecio al símbolo que representa el poder popular. Tal vez interpretó que ese desprecio era hacia la alcaldesa, pero no es así. Tanto el bastón de mando, que se negó a entregarme, como la medalla corporativa, que rechazó, son símbolos que representan el poder popular; es decir, representan a nuestro vecinos. Me entristeció por nuestros vecinos y también por Manuel Reyes. San Juan de la Rambla no merece que eso ocurra en un acto institucional tan importante. Y me apena por él mismo, porque deteriora su imagen institucional. Ha sido alcalde durante 24 años y es parte de la historia de San Juan de la Rambla. A él no le hacía falta ese gesto.

Reyes se quejaba del precio de esa medalla, ¿cuánto cuesta cada una?

La medalla es propiedad del ayuntamiento. Creo que en eso también está mal asesorado. Es un gasto que se hace una vez sola y cada medalla cuesta alrededor de 100 euros. Es propiedad municipal y está custodiada por el secretario. Si un edil, cuando se va, quiere conservar la medalla, debe pagarla para que se renueve. Es un gasto que se hizo una vez y que no se volverá a hacer porque si alguien se la quiere llevar, debe pagarla. Por eso digo que estuvo mal asesorado y, por eso, aconsejo a quien lo asesora que se lea las ordenanzas municipales.

¿Cuáles son los principales objetivos de su nuevo gobierno?

Los grandes objetivos ya están marcados desde el mandato pasado. Hablamos del gran proyecto de Las Aguas, que incluye cuatro actuaciones: el ordenamiento de la zona, el saneamiento, el nuevo paseo y la calle trasera de La Destila, que es la que permitirá peatonalizar el frente de costa. Hay otro proyecto clave que es la nueva entrada de San Juan por El Cubo, mediante una nueva calle, en la trasera de la Casa de los Pérez; la reordenación del tráfico, y nuevas aceras. Queremos terminar la Casa Grande y poner en uso la finca, ambas donadas por el Cabildo. Nuestra intención es desarrollar ahí un proyecto de formación y gestión agrícola de primer orden. Además, queremos mejorar varias vías que lo requieren, como la que sube de la TF-342 hasta las medianías de La Vera. En este mandato también queremos prestar especial atención al tema de la vivienda, que para nosotros es prioritario. Tenemos una inversión en dos viviendas sociales y queremos ampliarla a otras dos en breve. Es uno de los problemas más acuciantes. Las personas que quieren alquilar no encuentran oferta y tenemos que buscar la manera para reactivar ese mercado. Eso y muchas más cosas.

¿Cuándo se terminará el albergue para senderistas?

Se está terminando y formará parte de una concesión que incorporará también el molino de gofio del Risco de Las Pencas. Será un todo. Tenemos mucha esperanza en ese proyecto, que ya tiene demanda sin ni siquiera estar terminado. Cada vez que sale una noticia, la gente pregunta.

¿Estará en marcha en 2020?

Sí, en 2020 estará en marcha.

¿Qué pide al nuevo Gobierno canario respecto a movilidad?

Apostaría por una solución múltiple, a corto, medio y largo plazo. A corto plazo creo que es importante apostar por la descentralización de servicios y la racionalización de horarios. A medio o largo plazo, hay que ejecutar esas obras urgentes. El Norte se nos muere. Hay que mejorar la movilidad y lograr que el hospital del Norte sea realmente un hospital.

¿Qué otras demandas de ámbito comarcal defiende?

El Norte necesita un plan de viabilidad económica, que permita a la gente del Norte no tener que marcharse al Sur a trabajar. Un plan con ficha económica. Y debería incluir cosas que me preocupan muchísimo como el uso de las parcelas agrarias de todas las medianías altas de la Isla, que son el mejor controlador de los incendios. Se puede tratar como paisaje o como un bien económico a desarrollar. Preferiría que se apostara por un desarrollo agrícola. Con especial atención a la agricultura ecológica o al menos la agricultura de kilómetro cero. Debe ser un objetivo incuestionable para el Norte, junto a la mejora de la red de senderos y el cuidado de los visitantes.

¿Y respecto al agua?

El agua no es un problema urgente, sino urgentísimo. Lo de abordar el grave problema de la cantidad y calidad del agua en el Norte de Tenerife es para ayer. No podemos seguir compitiendo por el agua buena los vecinos para beber y los agricultores para regar. Eso no puede ser. Debe existir agua buena para beber y agua buena para la agricultura. Ya llegamos tarde. Hay que hacer inversiones hidráulicas que se pararon en 2012 con los recortes del PP. Llevamos al menos dos mandatos de retraso en inversiones hidráulicas.

¿Hacen falta desaladoras en el Norte de Tenerife?

Sí, hacen falta desalinizadoras y también desaladoras, que podrían ayudar para riego, piscinas y otras cuestiones.

¿Hay alguna novedad respecto a su situación judicial?

Ninguna. Seguimos esperando y seguimos tranquilos.