Una comunidad disuelta y sin propiedades concretas

La situación actual del edificio Iders, en el Puerto de la Cruz, es la de una comunidad de propietarios disuelta, sin una división horizontal de propiedades, en la que cada uno es dueño de una cuota porcentual del edificio, pero no de un apartamento, garaje o local concretos, según explican a El Día fuentes vinculadas al Iders. Esta situación facilita vías como una expropiación de la propiedad, en el caso de que sus dueños no lleguen a un acuerdo para demoler y rehabilitar el inmueble. El ayuntamiento y el Consorcio portuenses han estudiado la posibilidad de que el Iders sea expropiado mediante el pago de un justiprecio a todos sus propietarios (el valor del suelo menos el coste del derribo). Estas mismas fuentes subrayan que "si el consistorio comunicara a los propietarios cuál es el valor real de su porcentaje, se evitarían los movimientos especulativos y se avanzaría".

El Ayuntamiento de Puerto de la Cruz y el Consorcio Urbanístico para la Rehabilitación de la ciudad barajan la opción de aprovechar el nuevo Plan de Modernización, Mejora e Incremento de la Competitividad de la ciudad, conocido como PMM II, para "plantear unas condiciones urbanísticas lo suficientemente atractivas como para que un promotor privado invierta en la demolición del edificio Iders y en la construcción de un nuevo inmueble con el mismo número de plantas que el actual", según explicó el grupo de gobierno (PSOE-ACP).

El gobierno municipal reitera su compromiso de "avanzar en la búsqueda de una solución al problema del edificio Iders, que dura ya casi treinta años". Una solución que podría pasar por un derribo y una reconstrucción con ayuda de inversores privados.

González recuerda que la oposición fue la que promovió, en abril de 2018, un acuerdo plenario para que "se convocase desde el ayuntamiento a los propietarios del Iders a una reunión para acercar posturas que lamentablemente jamás se produjo". "Este nuevo grupo de gobierno está comprometido en la búsqueda de una solución que dé una respuesta lo más satisfactoria posible a todas las partes", insistió el alcalde socialista.

El concejal de Ciudad Sostenible y Planificación, David Hernández (ACP), sostiene que, aunque se trata de un inmueble privado, "es evidente que su situación afecta al interés general del municipio", por lo que el consistorio asume un papel activo en la búsqueda de soluciones.

Hernández señala que PSOE y ACP están trabajando en este asunto, "estudiando detenidamente las posibles alternativas".

Hernández aboga por "no dejar pasar más el tiempo, de forma que se vayan dando pasos que faciliten un acuerdo, pero actuando siempre con la debida prudencia para no tomar una decisión precipitada".

El concejal insiste en que "una de las opciones que se está barajando, lanzada desde el Consorcio Urbanístico para la Rehabilitación del Puerto de la Cruz, pasa por el PMM II".

Según Hernández, "en caso de que finalmente prosperase esta vía, que aún se está estudiando, los propietarios verían cumplida su reivindicación de no perder sus viviendas y, además, se podría dotar a la zona de una nueva plaza pública".

El edil de Ciudad Sostenible y Planificación aclara que "no se descarta ninguna alternativa" y que la prioridad del gobierno municipal es "tratar de llegar a un punto de encuentro entre todas las partes que permita desbloquear por fin la situación después de décadas enquistada".

Entre las posibles alternativas, se mantiene la posibilidad de una expropiación del inmueble por motivos de interés general para proceder a su demolición y posterior reconstrucción, a través de una concesión o venta de la parcela.

El presidente del PP portuense y edil, Ángel Montañés, afirmó esta semana que solo hay dos alternativas para que el Iders deje de ser un monumento al abandono: un acuerdo entre propietarios o una expropiación "muy bien justificada".