Los jardines de la ermita del Hermano Pedro, en el barrio santausulero de Tamaide, acogerán este domingo, a partir de las 18:00 horas, la plantación y bendición de un pequeño ejemplar del conocido como árbol del santo Hermano Pedro: un esquisúchil, una especie en peligro de extinción que está íntimamente ligado a la memoria del santo chasnero. El obispo de la Diócesis Nivariense, Bernardo Álvarez, bendecirá el esqueje que se plantará en el transcurso de un acto religioso y festivo que se desarrollará en la plaza de Tamaide.

El esquisúchil o Bourreria huanita es un tipo de árbol raro y longevo, del que aún se conserva el ejemplar que en 1657 sembró Pedro de San José Betancur en el jardín de una iglesia de Antigua, en Guatemala, donde fue jardinero y sacristán. De ese hecho proviene su popularidad y que sea conocido como el árbol del Hermano Pedro.

El alcalde santaursulero, Juan Acosta (AISU), subraya que "el acto de siembra y bendición del esquisúchil forma parte del programa de las fiestas de Tamaide en honor al Santo Hermano Pedro, que se celebran del 19 al 21 de julio".

"El propósito de esta siembra es perpetuar la memoria del Hermano Pedro a través de este árbol asociado a la historia de su vida, al tiempo que se refuerzan los lazos de fraternidad y la vinculación del santo con este barrio y la ermita que lleva su nombre", detalló.

Esta especie, que tiene flores aromáticas, se encuentra en peligro de extinción en su región centroamericana original. Hace una década se trajeron algunos ejemplares a Tenerife con el fin de crear lazos de unión entre Guatemala y Canarias, y para intentar su aclimatación en el Archipiélago.

Esa remesa, donada por el editor Juan Francisco Delgado a raíz de su viaje a dicho país con motivo de la elaboración del libro "Los dos mundos del Santo Hermano Pedro", fue plantada en distintos puntos de Tenerife, como Granadilla, La Orotava, el Obispado de La Laguna, Arico, El Sauzal, Santa Cruz, Adeje o Güímar, municipio del que procede el ejemplar que plantarán en Tamaide.

Los organizadores del acto, María del Cristo Sánchez y Goyo Jorge, explican que "se trata de un esqueje del árbol que se plantó en el paraje güimarero de Lomo de Mena, dañado de forma severa por un fuerte viento, lo que no impidió la supervivencia de algunos brotes que fueron llevados al Jardín Botánico del Puerto de la Cruz, donde han sobrevivido. Uno de esos retoños será el que sembraremos este domingo".

La idea de traer este árbol al barrio surgió en 2014, cuando Goyo Jorge supo de su existencia y su historia a través de un familiar que trabaja en el Jardín Botánico. La propuesta fue bien acogida por un grupo de vecinos, que ha promovido el traslado del esquisúchil a Tamaide.