"Nunca antes me había planteado entrar en política, pero consideré que era el momento de dar un paso adelante, para intentar aportar mi granito de arena en un cambio que se hacía imprescindible". Con esta frase, el consejero insular de Cs Enrique Arriaga ya argumentó en su discurso durante la sesión de investidura del Cabildo que bajo su punto de vista era necesario cambiar las cosas. Y así lo ha hecho, al sumarse ayer a una moción que junto al PSOE y Sí Podemos Canarias pretende arrebatar la presidencia insular a CC.

Arriaga se incorporó como responsable de Prevención de Riesgos Laborales en el Cabildo en 2001. Desde su puesto de funcionario ha asegurado haber sido testigo del deterioro exterior de la imagen de esta institución, lo que le animó a sumarse a Ciudadanos en 2015.

Los resultados electorales hicieron que los votos de Cs fueran determinantes a la hora de conformar una mayoría que diera estabilidad a la Corporación tinerfeña. Durante semanas, Arriaga se ha reunido con unos y con otros, jugando al despiste para que el equipo de gobierno, conformado en un principio por CC, no conociera que su verdadera intención era participar en una censura que les arrebatara el poder. Ayer, desobedeciendo las directrices de la dirección de su partido, -que les había ordenado que se mantuvieran en la oposición-, presentó la moción para hacer presidente a Pedro Martín.