Juan Ramón Martín Pérez es, desde el sábado, 15, alcalde de Arafo con mayoría absoluta. El día que contactamos con él aún daba clases en un instituto de Lanzarote. Es licenciado en la especialidad de Historia por la Universidad de La Laguna (ULL). Trabajó en empresas dedicadas a la agricultura y a los servicios, antes de acceder al Ayuntamiento arafero en calidad de personal de confianza. Ocurrió en el año 2008 y siendo alcalde Domingo Calzadilla. Comenzó como concejal en 2011, mandato en el que ejerció como responsable de varias áreas. Siguió en el mandato de 2015 y ahí fue designado primer teniente de alcalde. Cuando lo eligieron candidato de la Agrupación Independiente de Arafo (AIArafo-CC) coincidió con su destino, por la Consejería de Educación, a un instituto de Lanzarote, por lo que tuvo que solicitar un permiso especial para la campaña desarrollada durante el mes de mayo. Ya lo ha dejado todo y ejerce como alcalde, siendo el primero, de los tres que ha tenido el municipio en los últimos 70 años, que nació en Arafo, en la zona conocida por El Barrero.

¿Cómo fue designado candidato e ir a dar clase a Lanzarote?

Lo mío fue una decisión del partido y de José Juan Lemes, que fue quien me propuso, después de que él dijera que solo quería estar ocho años en la Alcaldía. Cumplió su palabra y se abrió el proceso para la elección del candidato y antes de la Navidad de 2018 ya estaba liderando este proyecto. Lo estuve pensando durante unas semanas y terminé aceptando, aunque se cruzó por medio una orden de incorporación a este instituto de Lanzarote que me obligaba a cumplir, porque soy profesor sustituto. La precampaña la hicieron todos los partidos y la mía la tuvieron que hacer los compañeros y yo solo algunas veces, para lo que me desplazaba.

¿Qué idea tiene para ir aplicando en Arafo?

Nosotros tenemos que hacer un doble trabajo, el de las grandes cosas que Arafo necesita, como lo del saneamiento, en el que habrá que trabajar duro; también tenemos un problema con las infraestructuras viarias, en las que tenemos que seguir una línea ya iniciada; la falta de agua potable en la zona alta del municipio y que somos conscientes de que somos deficitarios en infraestructuras deportivas. Para todos estos temas hay que buscar financiación. Pero también hay que intercalar con pequeñas cosas, con el día a día de los vecinos. Nuestro lema de campaña era Compromiso y cercanía y es una fórmula en la que creemos, es una forma de hacer política en la que queremos seguir.

En la red de saneamiento municipal, ¿cuál será su misión?

Fuera del Polígono Industrial Valle de Güímar, Arafo tiene una red de saneamiento baja, escasa; por tanto, habrá que trabajar en un plan de etapas para dotar al municipio, de aquí a ocho años, de un mayor número de calles con ese equipamiento básico. Ahora mismo hay proyectos en los que se está trabajando a través de cooperación municipal. Hay que terminar esa planificación y ejecutarla para, después, hacer una búsqueda activa de financiación. Somos muy conscientes del problema que tenemos y que no podemos mantener más la contaminación del subsuelo a través de los pozos negros. Además, hay que procurar trabajar en la recuperación del agua ya depurada. Para nada nos vale tener una depuradora en el Valle de Güímar si no le llegan las aguas negras. Nuestro esfuerzo y sacrificio estará destinado a la búsqueda de financiación para aumentar el tanto por ciento del saneamiento instalado en Arafo. Esta es una cuestión que requiere de la unión de todos los partidos y tenemos que ir todos de la mano, porque la búsqueda de financiación, obviamente, supera lo municipal, ya que tendremos que ir al Cabildo, al Gobierno de Canarias e, incluso, al Estatal, porque este es un problema de todos y habrá que buscar las fórmulas que lo solucionen.

¿Tienen dificultades con el agua de abasto, de consumo?

No, nosotros no tenemos ni problemas de flúor ni de suministro. En breve, que es una de las cosas que hemos batallado, se inaugurará un depósito situado en la zona de El Carmen. Con ello partiremos el municipio en dos en esta materia, lo que nos permitirá tener cubiertas las necesidades durante bastantes años. Ese no es problema.

En Educación, en el mantenimiento y reforma de colegios ¿cuánto invierte Arafo?

Nuestro grupo de gobierno va a tener un compromiso con la educación pública muy importante. La primera reunión después de la toma de posesión será con la directora del colegio, con la que ya he quedado, pero no para presentarnos, no, es ya para trabajar, y así se lo he dicho. A esa reunión asistirá el mayor número posible de concejales y vamos a sentarnos para hablar de las necesidades del plan de mejora del colegio que habrá que realizar en verano. El compromiso de este grupo de gobierno para con la educación pública va a ser inequívoco y mejoraremos lo que hay, manteniendo lo bueno que ya se ha hecho, pero siempre contando con el colegio y sus responsables.

Y en cuanto a la ordenación del territorio, el Plan General, ¿cómo lo tiene Arafo?

El Plan General de Ordenación ha sido devuelto al ayuntamiento. Estaba en la Consejería de Política Territorial, hubo una petición para que volviera y hemos trabajado para ponerlo en marcha. Creemos que la única manera de echar a andar este asunto es con la participación de los vecinos. Una de las cosas que tenemos muy claras es el papel de los ciudadanos en este gobierno. Creo que era Adolfo Suárez el que decía que "la opinión pública es la que juzga y la que manda", y nosotros eso es lo que pretendemos. El pueblo que queremos es el que tiene que salir de ese planeamiento y en eso tienen que tener opinión todos los que conformamos Arafo. Nuestro municipio no puede estar masificado, con una característica e idiosincrasia muy peculiar que queremos mantener; por lo tanto, la idea es trabajar esto, sobre todo, pero con la opinión fundamental de los vecinos. Tendremos reuniones por zonas, analizando con calma y detenimiento las mejores soluciones.

¿Contemplan reservas para viviendas sociales, para servicios municipales?

Claro, por supuesto, ya tenemos reservados los usos, los espacios para los diferentes servicios. Pero, como le dije antes, en el nuevo Plan General de Ordenación tenemos que ir trabajando en diálogo y en el municipio. Ya tenemos mucho adelantado, pero hay que profundizar y que matizar en algunos de los aspectos fundamentales.

Otro de los puntos fundamentales de los municipios son sus comunicaciones terrestres. ¿Cómo están en vías internas?

Nosotros tenemos dos epígrafes en esta cuestión. Las insulares que pasan por nuestro municipio y las municipales. En las vías del Cabildo tenemos tres grandes problemas: el colapso que se produce en la zona de La Hidalga, punto en el que ya trabajamos con el Cabildo para su solución; el problema de tráfico que hay en la zona de El Pino, que es el acceso al casco con un cruce en el que confluyen cinco vías, tres son insulares y dos son calles -con lo que ya se puede uno hacer una idea del caos que se produce- y para lo que no se ha encontrado solución, pero estamos en ello; y luego tenemos la zona de El Carretón, en la parte baja, donde se encuentra la rotonda que da acceso al polígono, un punto por que pasan todos los vehículos que proceden del área metropolitana y que se dirigen a los puestos de trabajo, lo que origina un lío de tráfico. La solución definitiva podría ser un puente inacabado que existe en la zona, que podría ser el acceso directo a los que vayan al Polígono Industrial Valle de Güímar. En estos momentos estamos haciendo un plan de reasfaltado, referido a las vías municipales, porque muchas de las calles ya necesitan de un repaso. También hemos pensado en los caminos rurales, para los que diseñamos un plan específico de rebacheo y arreglo.

¿Cree que los retrasos en las inversiones en carreteras y en sanidad le han pasado factura a CC por parte de los que han denunciado incumplimientos?

Cuando hablamos de unas elecciones municipales entran en juego otros factores. Yo creo que en los pueblos pesa mucho el candidato, mientras que al nivel del Gobierno de Canarias son otros factores los que se deben analizar. Además, hay que tener en cuenta que hubo muchas elecciones en el mismo día. Todo eso hay que analizarlo individualmente. Siempre hay factores que influyen en la elección.

¿Le preocupa que haya un cambio en la Presidencia del Cabildo?

Tengo clarísimo que el mejor presidente que puede tener la Isla es Carlos Alonso. Eso no me cabe ni la menor duda, por eso la Agrupación Independiente de Arafo apostó por él y pidió el voto. Creo que es una gran persona, que ha hecho una gran labor desde esa corporación, es una persona cercana, que tiene en su cabeza los problemas de la Isla y creo que se merece estar de presidente cuatro años más, para que culmine los proyectos iniciados. Es la mejor persona para ese puesto.

El anterior alcalde dijo que solo iba a estar ocho años y ha cumplido. En su caso, ¿se pone algún tope de mandatos?

No solo pongo un tope cronológico, sino un marco geográfico, porque también tengo las dos cosas muy claras. Estaré ocho años como tope al frente de la Alcaldía, ni un día más, y me iré a dar clases. En cuanto al marco geográfico, también, porque no tengo ningún interés por estar en ninguna institución fuera del Ayuntamiento de Arafo. Sé que hay gente que se presenta a varios puestos, me parece lícito, pero tengo claro que mi dedicación es exclusivamente Arafo. Eso lo tengo claro y no tengo aspiraciones fuera de mi municipio.