José Miguel Rodríguez Fraga nació en Vilaflor, pero es alcalde de Adeje desde 1987. Tiene 72 años y tras 32 al frente del ayuntamiento dice que no sabe cuándo lo dejará. Cuenta que tiene muchos proyectos para seguir durante bastante tiempo y siempre, menos cuando comenzó, gobernó con mayoría absoluta. Está convencido de que este es el tiempo de los periodistas para seguir contando cómo se forman los pactos. En su primer mandato estuvo en la oposición como concejal y en la segunda, en 1987, gobernó con pactos, desde ahí todo fue ganar con holgura y con quórum suficiente.

Con ese bagaje político, ¿recuerda cuándo fue la vez que más trabajo le costó conseguir la mayoría?

La verdad es que no hemos tenido mucha dificultad, se han vivido incidentes con concejales que se han ido a otros partidos, pero siempre hemos ganado con holgura.

Entonces, ¿cuál puede ser la clave del éxito para ganar por mayoría?

Creo que porque se ha conseguido desarrollar un proyecto en una situación muy dinámica y cambiante en el municipio. Creo que la gente ha visto en nosotros una línea de estabilidad, de seguridad, con un rumbo marcado y que es el que se ha seguido. Eso lo valoran en cada una de las elecciones. Ha ido cambiando, porque unas veces hemos ganado con 17 y en otras ocasiones, con 13, pero siempre con mayorías holgadas.

¿Cree que ha vuelto a ganar por haber presentado algún proyecto que ha ilusionado al electorado?

No creo que sea por algo concreto, sino por la misión realizada, tanto por cómo hemos llevado la gestión turística y el efecto que ha jugado. Esto provoca que la gente se de cuenta de nuestro empeño en crear un eje generador de riqueza y de distribución entre la población, a través de servicios municipales. En este municipio hay un asunto como es la convivencia, con toda esa gente que se ha ido asentando aquí y a los que hay que darles servicios. Yo creo en evaluar el conjunto de lo que se hace y de lo que no se ve, de cuánto hay en becas, o el compromiso que se ha adquirido con las personas, y ahí incluyo lo que se puede hacer con los mayores, con la juventud, con los discapacitados, para ayudar a las víctimas de violencia de género, etcétera. Yo creo que todas las actuaciones tienen incidencia en lo que la gente quiere. Hemos trabajado con bastante intensidad en todos esos compromisos y ha sido un eje vertebrador de toda la política para una población en la que conviven 114 nacionalidades pacíficamente, como tiene que ser, y razonablemente bien. Trabajamos para construir entornos donde la gente pueda vivir, con un compromiso por el medio ambiente y queremos seguir profundizando. Esa es la clave por la que la gente nos ha revalidado la confianza.

Pero a lo mejor en Adeje no tiene usted tanta oposición a realizar, por ejemplo, un PGO a gusto de la mayoría de Gobierno, con 14 concejales de su grupo, por 4 de CC, 2 de Podemos y 1 del PP.

Pero somos un municipio turístico y la gestión urbanística se ha consolidado a lo largo de todo este tiempo. En este mandato, que se han inaugurado cuatro hoteles en nuestro término municipal, se ha acometido un proceso inmenso de reformación de otras instalaciones y se han propiciado actuaciones en el territorio. Esta es una dinámica muy diferente al resto de los municipios y desde la Administración hay que responder, respetando la legalidad, al medio ambiente y al diseño de un espacio turístico de calidad como el que queremos y hemos generado.

En otros municipios no han sacado adelante un Plan General, ¿ustedes lo han logrado?

Nosotros tenemos PGO, pero ahora hay que adaptarlo a la nueva situación en la que estamos, pero no tenemos problemas con eso. Nuestro planeamiento vigente, con el que estamos trabajando, respeta lo que está. Ahora mismo estamos haciendo consultas, viendo cómo queda con la nueva Ley del Suelo, pero sin grandes problemas.

¿Cómo está ese municipio en cuestión de saneamiento?

Nuestros problemas en este asunto son mínimos. Tenemos el 99% del municipio conectado, tenemos un sistema completo de recogida de las aguas que compartimos con Arona, que hace el proceso completo; el de recogida, reciclaje y devolución a la agricultura; hacemos el ciclo total del agua y espero que sigamos coordinados con el Cabildo para seguir avanzando en esta materia.

¿Y en asuntos sociales?

Nosotros tenemos una estructura potente y diversificada, porque tenemos dos centros de discapacidad, un conjunto de atenciones básicas para los más desfavorecidos entre los que se cuentan colaboraciones con el banco de alimentos y otras organizaciones de voluntarios. Tenemos planes de empleo y ayudamos en formación y búsqueda de trabajo. Igualmente hay actuaciones concretas, como Salud y Calidad de vida, con la que actuamos en la prevención de enfermedades y ayudamos a personas con patologías graves a las que prestamos ayuda psicológica y de transporte. Nosotros nos sentimos comprometidos a ayudar a todos los que lo necesitan.

¿Cuál es el proyecto por el que apuesta en este mandato?

Mi gran apuesta es la de recuperar La Casa Fuerte. Yo creo que se lo debemos al pueblo de Adeje y a los antepasados, que la sufrieron, porque fue un instrumento de opresión, pero hay que recuperarla y convertirla en un monumento de convivencia, participación, de riqueza o de valor añadido para lo que es el casco de Adeje. Este va a ser mi objetivo. Recuperar esa fortaleza que significa mucho y que tiene un valor patrimonial muy importante. Se quemó a principios del siglo XX, era propiedad de los grandes terratenientes de la zona y supuso un centro de reclusión y tortura en la época franquista. Tiene una carga simbólica inmensa, de liberación y recuperación a los que la sufrieron.

¿Cómo se comporta el Cabildo con ustedes? Las inversiones insulares, ¿las considera importantes?

Nosotros tenemos mucha relación con el Cabildo y participamos en varias cosas como el Consorcio de Bomberos, del que somos parte muy importante en la aportación. También estamos en Turismo Tenerife, de forma muy notable.

¿Pero usted aboga por un cambio en el Cabildo?

Yo apuesto por el cambio de un candidato, como el del PSOE, que tiene un proyecto, que entiende el Gobierno insular de una forma diferente. Yo creo que sería muy bueno cambiar. Y no creo que esto nos perjudique en algunas de las cosas ya comprometidas. Una cosa no quita la otra y, lo mismo que Santa Cruz ha notado mejor que nadie las inversiones, igual lo será para los demás. Hay que separar lo político con sus pactos, de la realidad institucional.

¿Cree que el retroceso del CC se ha debido a la crítica por las escasas inversiones en carreteras, en sanidad y demás?

Yo pienso que en gran medida sí. Se ha visibilizado un gran cansancio por parte de esos dirigentes que les ha llevado a una inoperancia del sistema que parece fracasado y agotado. Si atendemos a la movilidad en la Isla, veremos que tenemos un paradigma sin solución, en el que nadie planifica o piensa con perspectiva de diez o quince años, que es uno de los problemas tenemos, lo cortoplacista de algunas acciones. Hay que hacer previsiones y eso no se está haciendo y de ahí el fracaso sanitario, esa reticencia permanente con el hospital del Sur o el de Norte, esa división de Isla que ha hecho CC con Tenerife, que somos un fisco de territorio. Lo que hay que hacer son buenas carreteras que nos acerquen unos a otros y participar todos de lo bueno que tenemos y solidarizarnos, en la parte de los desfavorecidos, para ayudarnos, que es de lo que se trata, en definitiva.

Cuando oye hablar de que hay que cambiar este gobierno porque CC lleva mucho tiempo en el poder, llevando usted 32 años, ¿qué opina?

Vamos a ver, ni el mucho tiempo ni el poco es malo en sí mismo, todo depende del resultado de lo que se haga. Yo llevo 32 años, pero siempre por mayoría y parezco poco cuestionado. Eso no es lo mismo que lo que sucede con el Gobierno canario, en el que una fuerza siempre está porque los otros dos nunca logran ponerse de acuerdo. Además, a esto súmenle la ineficacia de lo que hacen, con un modelo quebrado o carente de él. El estar mucho tiempo no es ni bueno ni malo, hay que valorar lo que percibe la gente.

¿Usted ha pensado en la retirada?

En algunos momentos pienso que hay otras cosas en la vida, pero para mí esto de ser alcalde ha sido un privilegio, gestionando este municipio. Además nunca he tenido la tentación de dar un salto a otra administración. No he deseado utilizar este puesto como plataforma.

¿Tampoco se ha puestos tope de cuando se retirará?

Yo no me planteo la vida de cuatro en cuatro años, que ya es corta de por sí. Ahora de momento afronto un nuevo mandato muy ilusionado, con las cosas que queremos hacer, la nueva organización que lo haga más operativo, cercano, viable, es decir las cosas que hemos dicho en campaña y eso es lo que me preocupa en este mandato; luego, ya veremos.