Crispín Mariano Pérez Hernández ha logrado su tercer mandato como alcalde por mayoría absoluta. Es fiel sucesor de Paulino Rivero, que fue el anterior alcalde del municipio y con el que estuvo 20 años, hasta que éste decidió dar el salto a la presidencia del Gobierno de Canarias. El actual alcalde, elegido por el 46,43% de los votos, en un censo de casi 9.000 habitantes, está en el ayuntamiento desde 1987, por lo que ya lleva en la vida municipal 32 años, que se dice pronto y siempre con mayorías absolutas.

¿Por qué cree usted que se dan siempre las mayorías absolutas en este municipio?

Yo creo que es por el trabajo serio, bien hecho, planificado y porque desde que entró la democracia en España, Paulino, que fue de los alcaldes más jóvenes, comenzó un trabajo para modernizar todas las estructuras de El Sauzal. Antes parecíamos "un barrio de" y ahora hemos transformado la comarca y nos hemos convertido en el más puntero. Además hemos logrado equilibrar la parte alta con la baja. Aquí tenemos la mala suerte de que el pueblo está dividido en dos por la autopista y hay que equilibrar; si hay un campo de fútbol en una de las zonas, hay que poner otro en la otra y lo mismo con todas las infraestructuras, un centro cultural, pues lo mismo, o un tanatorio. Hacemos una política del equilibrio de todo el municipio que nos está dando resultado, porque la gente cree en este grupo para seguir gobernando.

¿Ha renovado a las personas de la Corporación?

De los siete que conformamos el grupo de gobierno hay dos personas nuevas, muy jóvenes y preparadas. El resto siguen y continuarán en sus responsabilidades.

¿Se le plantean problemas por tener a muchos residentes, que solo duermen y viven una parte del día en el pueblo y otros, como los de las medianías, que viven de la agricultura y le pedirán otras cosas?

No, para nada. Los residentes están concentrados en las urbanizaciones que están por debajo de la plaza o en La Baranda o en la carretera general y el casco y la parte alta son más de gentes de El Sauzal de toda la vida, pero hemos conseguido que todo el mundo sienta lo de ser de aquí. Además, hemos sumado en viviendas sociales, que se han integrado incluso en las urbanizaciones privadas. Por ejemplo, la urbanización Sauzalito, que es importante, tiene 49 edificaciones sociales que integran a otras tantas familias. En el casco urbano tenemos a la de San Pedro, que acoge a otras 20. En Ravelo, en la zona de nivel uno de IBI también tenemos este tipo de construcciones.

Y a lo largo de este tiempo de vida municipal, ¿qué cambio es el que más le ha impactado en el pueblo?

El Sauzal ha cambiado de cabo a rabo. Cuando yo entré en el Ayuntamiento lo normal era ir con el fontanero municipal para arreglar los tubos vulcanizados o las fugas de agua y estar toda una noche para solventar esos problemas. La transformación ha sido brutal, por ejemplo, con la cultura, porque ese es un tema muy importante en este municipio y que se le debe a Paulino. Nosotros seguimos haciendo una apuesta muy significativa, que incluso la mantuvimos durante la crisis, porque entendimos que era fundamental para el comercio. Y creo que lo bonito de El Sauzal es que lo hemos ido transformando poco a poco, sin darnos cuenta y hemos creado un entorno coqueto, agradable, al que la gente le gusta venir, con una restauración muy cuidada, con restaurantes de primer nivel, en definitiva, que muy calladamente hemos logrado un municipio bien cuidado, en el que hasta las flores resalten. Yo creo que todo esto ha dado lugar a la transformación de El Sauzal.

¿Y lo mismo se puede aplicar al resto de los asuntos municipales? Por ejemplo, ¿cómo están en saneamiento?

Pues ese es el problema más grave de los que tenemos. En este último mandato ha sido el tema más importante al que nos hemos enfrentado en todas sus vertientes; el saneamiento. Con las depuradoras hemos tenido complicaciones en la zona de La Baranda, La Primavera y Los Naranjos, aunque ya, gracias a Dios, tenemos el dinero por parte del Cabildo para arreglarlos, aunque todavía hace falta presentar los proyectos. Pero también hemos tenido un problema con el flúor del agua, el más grave, el que más tiempo me ha quitado. Ya la obra ha comenzado, en octubre del año pasado, y espero que se acabe en agosto, con lo cual , a partir de ahí estará todo lo solucionado. Lo peor de El Sauzal ha sido el saneamiento y el agua en general, aunque está en vías de solución, lo del flúor en poco tiempo y la depuración en un año. Eso aquí porque luego a nivel insular hace falta esa gran conexión que lleve a todas las aguas para su reutilización hacia Valle Guerra, pero eso aún no se ha empezado.

¿Usted cómo valora que esté ahora casi aislado políticamente? Tegueste, Tacoronte, La Victoria, La Matanza, Puerto de la Cruz? todos eran de CC y hoy casi todo es del PSOE

No me preocupa mucho porque nosotros seguimos haciendo el trabajo normal y lo que no quiero es que El Sauzal se pare, porque me he marcado como meta que en un año volveremos a transformarlo de nuevo. Hace cuatro años lo hicimos con el entorno de la iglesia de Ravelo y ahora estamos con el entorno de la iglesia de San Pedro, justo debajo del Ayuntamiento, detrás de la torre, la plaza del Príncipe y la calle de San Nicolás, que estará en obras hasta noviembre o diciembre. Va a quedar espectacular, como quedó Ravelo. Lo que me preocupa es que se pare todo esto como consecuencia de las cuestiones políticas. Nos quedan cosas como el Centro de Salud, que ya está adjudicado, el cerramiento del pabellón de Ravelo por el tema del frío para los niños que está en exposición, es decir que El Sauzal en el próximo año y medio va a tener una serie de cambios muy positivos.

Más bien le preguntaba por lo que le puede afectar como municipios vecinos con los que comparten algunas cosas.

No afecta porque ya trabajamos con la Mancomunidad del Noroeste, especialmente el tema de los residuos. Estamos acostumbrados, en todos sitios se producen cambios, y la mancomunidad siempre ha funcionado como un servicio a los vecinos y se presta sin los colores políticos para todos. Por eso digo que, en este sentido y para mi, no afectan los cambios políticos.

Pero si el cambio se produce en el Cabildo, ¿ese sí le preocupa?

Hombre hasta ahora se ha realizado una planificación muy seria del presidente del Cabildo actual, Carlos Alonso, y aprobado por mayoría. Eso sí que me preocupa, que ahora se quede en veremos. Estamos hablando del futuro de los municipios y yo, será que con Carlos yo confío en su programación, espero que todo siga igual. El Cabildo ha cumplido con El Sauzal al 100%, tanto la presidencia como las áreas socialistas y esperamos que esto siga así en el futuro para que sigamos avanzando.

¿Ha pensado en retirarse?

La verdad es que no. Aunque esto tiene mucho de ilusión. La política es tener ganas de trabajar, levantarte cada día con la moral alta para que el pueblo siga avanzando. Mientras yo tenga ilusión voy a seguir aquí y trabajando por El Sauzal, del que estoy enamorado. Mientras pueda trabajar por él, seguiré aquí, cuando no se así ya veré como lo dejo. En este momento no lo he pensado, porque estoy bastante ilusionado.

De lo que queda por hacer, ¿cuál sería el proyecto que no ha acometido?

Yo tengo un sueño, que comparto con el arquitecto municipal, de hacer el mirador más importante del norte de Tenerife en la zona de La Garañona. Ese sitio tan emblemático de nuestro término municipal, que funciona bien, que va mucha gente y donde hemos pensado que se podría hacer un mirador flotante. Ya hemos pasado los terrenos a urbanos y nuestro arquitecto, que es de los mejores de Canarias, ya está trabajando en un proyecto que sería la gran obra que le daría respaldo al pueblo. Eso y seguir trabajando en equilibrio entre los dos barrios. También tengo un sueño para la parte alta como es la remodelación de toda la entrada a Ravelo, con las 160 palmeras que ya están plantadas y crear una gran avenida. El proyecto se va a sacar a licitación, para que la gente opine y demás. Estos serían mis sueños de presente y futuro.

¿Qué opina de los que dicen que CC lleva mucho tiempo gobernando y que hay que cambiarlos?

Los que dicen esas cosas no están en la realidad. Los ciclos, creo que los marcan las ilusiones de las personas. Da lo mismo en el partido en el que estés, sino tienes ganas de trabajar. A mí también me lo dicen aquí, "es que ya lleva 32 años", eso no es un argumento, porque sigo teniendo ganas de seguir haciendo cosas. Si voy al Ayuntamiento a las 12 de la mañana, es porque ya faltan alicientes y de eso la gente se da cuenta. Los ciclos los marcan las personas, los proyectos, los tiempos. Nosotros nos presentamos a un examen cada cuatro años y aquí seguimos con estos resultados. Por algo será.